La noción de rumia mental, o overthinking en inglés, hace referencia a pensamientos que regresan en bucle y que nos cuesta controlar. Estos pensamientos, vinculados al pasado o al futuro, pueden afectar fuertemente la vida cotidiana, ya que a menudo son fuente de fatiga o incluso de sufrimiento psicológico. Rumiar también puede atraparnos en un círculo vicioso del que a veces es difícil salir. Sin embargo, es importante encontrar soluciones para salir de la cavilación y liberar la mente de estos pensamientos parásitos que pueden tener un impacto real en la salud mental.
Algunas personas parecen más propensas a sufrir cavilaciones mentales, aunque en realidad puede afectar a todo el mundo, hombres, mujeres, adultos jóvenes, personas mayores… Generalmente, las personas con trastornos de ansiedad son las más afectadas. Cuando surge un problema, intentarán “pensar demasiado” para encontrar una solución a este problema. El miedo, la ansiedad, la ansiedad generalizada y la dificultad para gestionar las emociones son posibles causas de la rumia mental. Este fenómeno está inscrito en nuestro cerebro reptiliano y nos permite reaccionar mediante la reflexión ante un problema. Para algunos, sin embargo, este reflejo parece estar algo bloqueado, lo que provoca un círculo vicioso del que puede resultar difícil salir.
Los investigadores han creído durante mucho tiempo que la rumiación es un síntoma causado por la depresión. Estudios recientes muestran (…)
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