El cáncer, responsable de casi 10 millones de muertes en 2022, sigue siendo la segunda causa de muerte a nivel mundial. Dado que la población sigue creciendo y envejeciendo, se prevé que las muertes relacionadas con el cáncer aumenten significativamente, hasta alcanzar los 17 millones por año en 2045.
Sin embargo, un estudio reciente del Instituto de Salud de Luxemburgo (LIH) aporta noticias alentadoras sobre la lucha contra el cáncer en el país. Los investigadores del grupo de epidemiología y prevención del cáncer (Epican), los doctores Allini Mafra y Claudine Backes, observaron una disminución de la mortalidad por cáncer en Luxemburgo entre 1998 y 2021.
La investigación se basa en datos del Registro Nacional de Causas de Muerte, gestionado por el Servicio de Epidemiología y Estadísticas de la Dirección de Salud y analiza cerca de 24.000 muertes (23.750 para ser precisos). Proporciona un análisis detallado de las tendencias por tipo de cáncer, género y grupo de edad, utilizando tasas de mortalidad estandarizadas por edad (ASR) para realizar un seguimiento del progreso.
La tasa de mortalidad estandarizada es una herramienta estadística que permite comparar las tasas de mortalidad entre diferentes poblaciones, teniendo en cuenta su estructura de edad. En otras palabras, permite responder a la pregunta: ¿cuál sería la tasa de mortalidad de esta población si tuviera la misma estructura de edad que una población de referencia? En nuestro caso, la referencia aquí es la población europea.
Una disminución constante del 2,1% anual
Los resultados del estudio son alentadores. La tasa de mortalidad estandarizada por edad (ASR) para todos los cánceres disminuyó un 2,1% anual, lo que ilustra los avances logrados en la prevención, la detección temprana y los tratamientos innovadores. Sin embargo, algunos tipos de cáncer son más problemáticos. Por ejemplo, se han observado aumentos en las tasas de mortalidad por cáncer de laringe y pulmón en mujeres adultas, así como por linfoma de Hodgkin en hombres.
El cáncer de pulmón sigue siendo la principal causa de muerte entre los hombres, seguido del cáncer colorrectal y de próstata. Entre las mujeres, el cáncer de mama sigue siendo la principal causa de muerte. Lo que es aún más preocupante es que más de cuatro de cada cinco muertes por cáncer ocurren en personas de 60 años o más. “No podemos ignorar los desafíos que plantea el envejecimiento de nuestra población”, analiza el Dr. Allini Mafra.
A pesar de estos buenos resultados, los investigadores insisten en la necesidad de continuar los esfuerzos de salud pública, en particular fortaleciendo aún más el Plan Nacional contra el Cáncer. “Si bien la disminución de las tasas de mortalidad por cáncer es prometedora, es crucial explorar enfoques innovadores para la prevención, la detección temprana y el tratamiento, e implementar los hallazgos sobre el terreno para lograr mejoras duraderas en la lucha contra el cáncer”, concluye la Dra. Claudine Backes.