La compañía espacial estadounidense Blue Origin lanzó el jueves por primera vez su gran cohete New Glenn. Este vuelo inaugural parece un punto de inflexión para la empresa del fundador de Amazon, Jeff Bezos, que pretende alcanzar a su rival SpaceX.
Con 98 metros de altura y el tamaño de un edificio de unas 30 plantas, New Glenn despegó con éxito hacia las 2:03 hora local (8:03 en Suiza) desde la base espacial de Cabo Cañaveral, en Florida. El vuelo inaugural de este potente cohete, parcialmente reutilizable, se esperaba desde hacía años y se había pospuesto varias veces.
La misión ha logrado su “objetivo principal”, es decir, poner en órbita la segunda etapa del cohete, anunció Ariane Cornell, ejecutiva de Blue Origin, durante una transmisión en vivo. Ésta era la ambición de la empresa. “¡Lo logramos!”, se regocijó su director ejecutivo, David Limp, en X. “Todo lo que vaya más allá de eso es una ventaja”, dijo antes del lanzamiento.
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Después de vuelos turísticos
Si bien la compañía lleva varios años llevando turistas al espacio con su cohete New Shepard, todavía no ha realizado ningún vuelo orbital.
El multimillonario Elon Musk, jefe de la empresa SpaceX, que actualmente domina el mercado con sus cohetes Falcon9 y Falcon Heavy, no tardó en saludar a su rival Jeff Bezos. “¡Felicitaciones por alcanzar la órbita en el primer intento!” Elon Musk publicó en su plataforma X.
Las dos figuras de Silicon Valley fundaron cada una sus empresas espaciales a principios de la década de 2000, pero Blue Origin ha progresado a un ritmo mucho más lento que SpaceX, en parte debido a un enfoque más cauteloso en el diseño.
Con su nuevo cohete New Glenn, mucho más potente, Jeff Bezos pretende entrar en el nuevo mercado de poner en órbita satélites comerciales y militares, así como naves espaciales y astronautas, y competir así con SpaceX.
Sin embargo, la compañía de Elon Musk está desarrollando el cohete más grande y potente jamás diseñado, el Starship, que, casualmente o no, realizará un séptimo vuelo de prueba más tarde el jueves.
Parcialmente reutilizable
Al igual que el Falcon 9 de SpaceX, el cohete New Glenn fue diseñado para ser parcialmente reutilizable, una especificidad que permitiría a la compañía no sólo reducir costos sino también tener una mayor tarifa de vuelo.
Se suponía que la primera etapa reutilizable del cohete aterrizaría en una barcaza en el Océano Atlántico después de separarse de la segunda etapa, pero no pudo hacerlo.
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Tras este éxito, se espera que sigan otros vuelos de New Glenn en 2025. Blue Origin ya ha firmado contratos con varios clientes, entre ellos la agencia espacial estadounidense para una misión no tripulada a Marte y el gobierno estadounidense para misiones de seguridad. nacional.
Se espera que New Glenn continúe con una serie de docenas de misiones por valor de cientos de millones de dólares, incluidos hasta 27 lanzamientos para la red de Internet satelital Kuiper de Amazon, que rivalizará con el servicio Starlink de SpaceX.
agencias/taxi
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