lLa denuncia, a la que el Departamento de Estado debe responder en un plazo de 60 días, pide que esta ley se aplique a Israel, que, según los demandantes y grupos de derechos humanos, ha sido ilegalmente exento de ella.
Desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás palestino en octubre de 2023, Estados Unidos ha promulgado leyes que le autorizan a proporcionar el equivalente a 12.500 millones de dólares en ayuda militar a su aliado estratégico.
La guerra, desencadenada por un ataque sin precedentes de Hamás, se saldó con la muerte de 1.208 personas del lado israelí, la mayoría civiles, según un recuento de la AFP basado en cifras oficiales.
Más de 45.059 palestinos murieron en la campaña militar israelí de represalia en la Franja de Gaza, la mayoría civiles, según datos del Ministerio de Salud para Gaza del gobierno de Hamás, considerados fiables por la ONU.
Un demandante palestino-estadounidense, Said Assali, dijo en una conferencia de prensa en Washington el martes que su tía había sido asesinada con sus seis hijos en un ataque israelí contra la ciudad de Gaza, y afirmó que en esta ocasión se habían utilizado armas estadounidenses.
“Nuestras familias han pagado un precio insoportable por la negativa del Departamento de Estado a hacer cumplir sus propias leyes.“, subrayó Assali.
Dos ex empleados del ministerio dijeron a la prensa que las autoridades estadounidenses aplicaron una regla informal “excepcional para Israel” cuando se trata de examinar sus acciones militares.
“La realidad es que Israel sigue reglas diferentes. El Departamento de Estado creó este proceso único, engorroso y de alto nivel (…) que sólo se aplica a Israel”, dijo uno de ellos, Charles Blaha.
El Departamento de Estado no hizo comentarios el martes sobre la presentación de la denuncia.
Amnistía Internacional ha acusado a Israel de “cometer genocidio”contra los palestinos en la Franja de Gaza. Y la Corte Penal Internacional (CPI) ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su ex ministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Israel ha negado enérgicamente todas estas acusaciones.
Ahmed Moor, otro denunciante, explicó que siete miembros de su familia vivían en Gaza “bajo el miedo constante a los bombardeos” y que otro había sido asesinado.
“Estos miembros de mi familia son personas como usted y como yo, y sus vidas fueron destruidas por armas estadounidenses en violación directa de la ley estadounidense.”, suplicó.
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