Suiza debe alcanzar la neutralidad de carbono de aquí a 2050. El Consejo Federal fijó el miércoles la entrada en vigor de la ordenanza vinculada a la ley de protección del clima, aceptada por el pueblo en junio de 2023. En particular, están previstas ayudas para sustituir la calefacción de petróleo y gas en los edificios residenciales.
Para lograr la neutralidad de carbono, la ley, que también se presentará a principios del próximo año, prevé en particular un programa de impulso en el ámbito de la edificación con vistas a sustituir las calefacciones que funcionan con gasóleo o gas y las calefacciones eléctricas mediante sistemas renovables.
El objetivo también es mejorar la eficiencia energética de los edificios. Para ello está previsto un máximo de 200 millones de francos al año durante diez años.
Las condiciones de la subvención se centran en ámbitos en los que actualmente el apoyo cantonal es insuficiente. Por lo tanto, se hace hincapié en los edificios residenciales con calefacción por combustibles fósiles, afirmó el gobierno en un comunicado de prensa. Otro punto importante es la sustitución de calentadores eléctricos ineficientes por sistemas de calefacción modernos que funcionan con energías renovables.
Apoyo a procesos innovadores
En cuanto al apoyo a tecnologías y procesos innovadores hasta 2030, se destinará cada año una cantidad de 200 millones de francos para ayudar a las empresas a reducir sus emisiones de CO2 a cero neto de aquí a 2050.
Estas empresas pueden establecer voluntariamente hojas de ruta explicando cómo pretenden alcanzar este objetivo. Pueden solicitar apoyo financiero para las tecnologías y procesos que apliquen. La orden especifica, entre otras cosas, el procedimiento para la concesión de las ayudas, o cómo las pequeñas y medianas empresas pueden acceder a este estímulo a través de sus colegios profesionales.
Adaptación al cambio climático
La ordenanza define además medidas en las áreas de adaptación al cambio climático. Una red recién creada debe mejorar los intercambios entre la Confederación, los cantones, los municipios y los círculos económicos y científicos.
También preocupa la compatibilidad de los flujos financieros con los objetivos climáticos. El sector financiero puede realizar voluntariamente pruebas climáticas, que permiten al Consejo Federal comprobar periódicamente los avances del sector.
ats/lan
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