Un rover chino ha encontrado nuevas pistas sobre la presencia de un antiguo océano en Marte, al identificar rastros de costas que el agua podría bordear, según un estudio publicado el jueves.
Sin embargo, la teoría que defiende la presencia de un océano que cubría más de un tercio del Planeta Rojo sigue siendo objeto de debate, y un investigador que no participó en el estudio cuestionó la validez de los últimos descubrimientos.
El rover Zhurong fue depositado en 2021 en una llanura del hemisferio norte, en la región de Utopía, que contiene evidencias de una presencia pasada de agua.
El autor principal del estudio Nature, Bo Wu, de la Universidad Politécnica de Hong Kong, explicó a la AFP que una serie de elementos apuntaban a un océano antiguo: “conos huecos, cruces poligonales y corrientes grabadas” en el suelo.
Investigaciones anteriores sugirieron que los conos huecos pueden haberse originado en géiseres de lodo y, a menudo, se formaron en áreas que contenían agua o hielo.
Según el estudio, la información recopilada por el rover, así como los datos satelitales, también sugieren la presencia de una costa cercana.
Los investigadores imaginan un escenario en el que el océano se formó mediante inundaciones hace unos 3.700 millones de años. Antes de congelarse, trazando una línea costera, luego desapareció hace unos 3.400 millones de años.
El Sr. Bo insistió en que el equipo no “afirma que los hallazgos prueban definitivamente que había un océano en Marte”.
Este nivel de prueba probablemente requerirá una misión para traer muestras de suelo marciano a la Tierra para su examen.
Otro científico que analizó otras señales de un posible océano, Benjamín Cárdenas, se mostró “escéptico” sobre las conclusiones del estudio.
Él cree que el equipo chino no tuvo suficientemente en cuenta hasta qué punto el fuerte viento marciano arrastró sedimentos y erosionó rocas durante unos pocos miles de millones de años.
“Tendemos a considerar a Marte como poco activo, como la Luna, ¡pero es activo!”, afirma a la AFP este investigador de la Universidad americana de Pensilvania.
Dijo que investigaciones previas utilizando modelos informáticos habían sugerido que “incluso bajas tasas de erosión marciana” destruirían rastros de una antigua costa durante esos períodos de tiempo.
El Sr. Bo reconoce que el viento puede haber desgastado algunas rocas, del mismo modo que los impactos de meteoritos pueden “excavar rocas subterráneas y sedimentos a la superficie de vez en cuando”.
Incluso si la teoría sigue siendo discutida, y a pesar de sus reservas, Cárdenas “tiende a pensar que había un océano en Marte”.
Encontrar la verdad podría ayudar a resolver un misterio mayor: si la Tierra es el único planeta del sistema solar capaz de albergar vida.
“La mayoría de los científicos creen que la vida en la Tierra surgió en el fondo de los océanos, donde se encontraron gases calientes y minerales subterráneos, o cerca de la superficie en pequeños charcos de marea”, dijo Cárdenas.
“Y así, la evidencia de un océano hace que el planeta parezca más hospitalario” por haber albergado vida allí, añadió.
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