COP29: los líderes conservadores desaceleran, a pesar de las nuevas y alarmantes cifras climáticas

El mundo debe alcanzar la neutralidad de carbono mucho más rápido de lo esperado, según nuevas estimaciones científicas publicadas el miércoles durante la COP29 en Bakú, donde los líderes de los países ricos, inspirados por Donald Trump, se muestran reacios a acelerar los esfuerzos en materia de clima.

Para los científicos del Global Carbon Project, las emisiones globales de CO2 generadas por la combustión de carbón, petróleo y gas establecerán otro récord este año, que también será probablemente el más caluroso jamás registrado.

Y el mundo debe aspirar a cero emisiones netas de CO2 para finales de la década de 2030 para esperar contener el calentamiento global a 1,5°C, en comparación con el final del siglo XIX.

Es decir, mucho antes de 2050, el horizonte previsto actualmente por un centenar de países.

En apenas cuatro minutos en el podio, el Primer Ministro de un pequeño país habitualmente discreto en este ámbito, Albania, despertó a la COP resumiendo el ambiente general.

“La vida continúa con sus viejas costumbres y nuestros discursos llenos de buenas intenciones sobre la lucha contra el cambio climático no cambian nada”, lamentó Edi Rama.

“¿Qué diablos estamos haciendo en esta asamblea, si una y otra vez no hay una voluntad política común para unirnos y poner las palabras en acción?” dijo, expresando alarma por el número de líderes ausentes en Azerbaiyán (el G20 casi no está representado).

Uno de ellos, el presidente francés Emmanuel Macron, también fue atacado directamente por su homólogo azerbaiyano Ilham Aliev en un virulento discurso contra los “crímenes” de Francia en Nueva Caledonia y otros territorios bajo su soberanía.

– Ir más allá de las palabras –

El regreso de Donald Trump al poder en Estados Unidos, que hoy emite el 11% de las emisiones globales, detrás de China (30%), complica los esfuerzos por revertir la curva de emisiones de gases de efecto invernadero en esta década.

Trump planea sacar a su país del acuerdo casi universal que está empezando a dar frutos, el firmado en la COP de París en 2015. Sólo Irán, Yemen y Libia no forman parte de él hoy.

Pero en Bakú, los líderes de los países occidentales traumatizados por la inflación, los déficits públicos y los movimientos sociales de los últimos años dicen abiertamente que quieren apretar el freno en lugar del acelerador.

La jefa del Gobierno italiano, Giorgia Meloni, afirmó el miércoles que no existe “una alternativa única” a los combustibles fósiles, que hay que tener una visión “realista” y desconfiar de cualquier “enfoque demasiado ideológico”.

“No podemos precipitarnos hacia el olvido industrial en nombre de la neutralidad de carbono”, declaró el primer ministro conservador griego, Kyriakos Mitsotakis, explicando que la “transición no será indolora”.

Aunque la negociadora alemana Jennifer Morgan asegura que “esta COP está avanzando”, los occidentales se muestran reacios a pagar más en tiempos de austeridad, en el mismo momento en que los países de África, el Caribe y el Pacífico piden más dinero para pagar y anticipar los daños causados ​​por las sequías e inundaciones que se espera aumenten o invertir en energía solar y vehículos eléctricos.

– 1.300 millones –

Para convencerlos, el jefe de la ONU sobre el Clima y los países vulnerables argumenta que un clima demasiado extremo provocará inflación y daños económicos en todas partes, no sólo en el Sur.

“Nos estamos acercando peligrosamente a una línea más allá de la cual no habrá vuelta atrás”, dijo Philip Davis, Primer Ministro de las Bahamas. “Los incendios que devoran vuestros bosques, los huracanes que azotan nuestros hogares no son desgracias lejanas sino tragedias compartidas”.

“Debemos aprovechar la que quizás sea nuestra última oportunidad para actuar”, instó también Russell Dlamini, jefe de gobierno de Eswatini.

Según un nuevo texto de negociación del miércoles, los países en desarrollo siguen pidiendo a los Estados desarrollados que pasen de 100 mil millones a… 1,3 billones de dólares en ayuda anual. Circulan otras cifras, consideradas más o menos irreales por los occidentales.

“No estamos aquí para mendigar”, subrayó el miércoles el Primer Ministro de Granada. La “asociación financiera” solicitada redunda en “el mejor interés de la humanidad” en su conjunto.

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