Las emergencias no terminan cuando la niebla es baja. Este es el desafío que se presentó varias veces este jueves, afirma Rega, que informa en un comunicado de prensa que tuvo mucho que hacer para transportar a tres recién nacidos prematuros a los hospitales de Lausana y Basilea.
Así, las diferentes tripulaciones transportaron a un bebé de Sion a Lausana y de Saint-Imier (BE) a la capital de Vaud “a pesar de las espesas nubes”, explica la empresa. En el vuelo de regreso, el centro movilizó a la tripulación para acudir una vez más en ayuda de un bebé recién nacido. A continuación, la tripulación se encargó directamente de un nuevo traslado desde el hospital de Thun (Bélgica) a una ambulancia situada en Basilea, aunque el acceso al hospital no fue posible debido a la visibilidad.
Dice que ha tenido que recurrir varias veces a la Low Flight Network (LFN), una red de rutas aéreas que cubren toda Suiza. “Como en una autopista, en caso de mala visibilidad, el helicóptero sigue una ruta de vuelo registrada en el ordenador de a bordo” que conecta aeropuertos, aeródromos, bases de Rega y, sobre todo, los principales hospitales del país. La red aún está en desarrollo.
Estos procedimientos de neonatología son exigentes porque requieren equipos especiales y personal adicional, agrega la empresa. “Los bebés prematuros necesitan un ambiente cálido porque aún no pueden regular su temperatura corporal tan bien como los adultos. Precisamente con este fin se les coloca en incubadoras”. Por lo tanto, los equipos deben desplazarse primero al CHUV o al hospital de Berna para cargar especialistas y equipos.
Related News :