Catorce muertos por el derrumbe del techo de una estación, día de luto el sábado

Al menos catorce personas murieron el viernes cuando parte del techo exterior se derrumbó en una estación de tren en Novi Sad, al norte de Serbia, dijo el presidente Aleksandar Vucic. “Esperamos que este sea el balance final, 14 personas murieron”declaró el presidente Vucic en televisión, precisando que cinco cadáveres no pudieron ser identificados.

El ministro del Interior, Ivica Dacic, había informado anteriormente de un número de muertos de doce. “Debemos unirnos para apoyar a las familias de quienes han perdido la vida y hacer todo lo posible para minimizar el daño y ayudar tanto como sea posible a quienes han perdido a sus seres queridos”.añadió Aleksandar Vucic. Dijo que entre los muertos había un niño, de seis o siete años. “Les aseguro que los responsables serán castigados”dijo.

Al caer la noche, los residentes de Novi Sad colocaron velas y flores en un monumento improvisado cerca de la estación.

También se reportaron varios heridos. Tres personas extraídas de los escombros se encuentran en estado grave, dos de las cuales están siendo operadas actualmente, dijo a la prensa Vesna Turkulov, directora del centro médico de la provincia de Vojvodina, de la que Novi Sad es la capital. “Las lesiones son muy graves”añadió.

El gobierno anunció que el sábado se guardaría un día oficial de luto, según un comunicado difundido por la televisión pública. El Instituto de Transfusión de Sangre de Novi Sad también pidió a los residentes que donaran sangre después del accidente.

Tres años de trabajo

Se utilizaron grúas y excavadoras para buscar supervivientes entre los escombros, según un fotógrafo de la AFP que se encontraba en el lugar. El primer ministro serbio, Milos Vucevic, por su parte, prometió una investigación sobre las causas del accidente.

“Insistiremos en encontrar a los responsables, a los que deberían haber garantizado la seguridad de la estructura. Mi más sentido pésame a las familias de los fallecidos”.dijo, y agregó: “Es un viernes negro para nosotros, para toda Serbia y para Novi Sad”.

Después de tres años de renovación parcial, una parte de la estación de Novi Sad, la segunda ciudad más grande de Serbia, reabrió sus puertas en julio. Pero algunas partes todavía están en construcción.

Sin embargo, la empresa Serbian Railways aclaró en un comunicado que el techo exterior que se derrumbó no formaba parte de las renovaciones realizadas.

En marzo de 2022 se inauguró una línea ferroviaria de alta velocidad entre Novi Sad y Belgrado.