-
-
¿Dónde podemos ubicar esta victoria en su panteón a veces trastornado, cuando las derrotas épicas parecían ocultar los grandes éxitos? ¿Allá arriba o no muy lejos? Gaël Monfils nunca hizo cosas como los demás, antes de esperar hasta los 38 años para ofrecer un juego dominado de principio a fin contra un top 5, en una serenidad que nada parecía alterar, ni el calor, ni los servicios de Taylor Fritz ( 3-6, 7-5, 7-6 [1]6-4), ni el temido formato de cinco sets –con una especie de desapego supremo que no siempre lo acompañó.