El Ministro de Justicia presentó ante la Comisión de Justicia de la Cámara de Representantes el quinto informe periódico de Marruecos sobre la aplicación de la Convención contra la Tortura. Este informe destaca las reformas legales e institucionales destinadas a fortalecer los derechos humanos y prevenir la tortura.
En un enfoque renovado para fortalecer los derechos humanos y el Estado de derecho, el Ministro de Justicia presentó recientemente ante el Comité de Justicia, Legislación y Derechos Humanos de la Cámara de Representantes el quinto informe periódico de Marruecos sobre la aplicación de la Convención contra la Tortura y la Tortura. Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes.
Este informe se inscribe en un marco de transparencia y de compromiso del Reino de respetar los convenios internacionales relativos a los derechos humanos. Destaca las continuas acciones de Marruecos para combatir la tortura y prevenir todas las formas de malos tratos, en particular a través de varias reformas legales e institucionales esenciales.
Marruecos continuó su compromiso de respetar los derechos humanos reforzando el marco legislativo vinculado a la lucha contra la tortura. Las acciones clave incluyen la ratificación en 2014 del Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura, que prevé visitas periódicas a los centros de detención para prevenir actos de tortura. En 2019, Marruecos también creó el Mecanismo Nacional para la Prevención de la Tortura, un organismo independiente responsable de monitorear la situación en las prisiones y otros lugares de detención. Además, el país ha revisado el Código Penal y el Código de Procedimiento Penal para proteger mejor los derechos de las personas y garantizar la implementación de las normas internacionales.
Otra prioridad destacada en el informe es la mejora de las condiciones de detención en Marruecos. Teniendo esto en cuenta, se han realizado esfuerzos considerables para modernizar los establecimientos penitenciarios del Reino. Estas reformas tienen como objetivo garantizar condiciones de detención que respeten la dignidad humana, con notables mejoras en las infraestructuras penitenciarias, un aumento del personal cualificado, así como una especial atención a los servicios de salud y la reinserción de los presos. .
La lucha contra la tortura sigue estando en el centro de la acción gubernamental, como lo indican las medidas adoptadas para garantizar que todos los actos de violencia o malos tratos en las prisiones y otros lugares de detención estén estrictamente prohibidos. Marruecos sigue trabajando para mejorar el marco jurídico, formar a los agentes de seguridad y educar a los ciudadanos en materia de derechos humanos. También se han puesto en marcha acciones específicas para concienciar a las autoridades judiciales y a los funcionarios penitenciarios sobre la importancia de prevenir la tortura.
El Ministro de Justicia reafirmó así el compromiso del Estado de seguir trabajando para promover los derechos humanos y respetar los convenios internacionales relacionados con la lucha contra la tortura. A través de estas reformas, Marruecos pretende no sólo cumplir con las obligaciones internacionales, sino también fortalecer la confianza del pueblo marroquí en su sistema judicial y penitenciario.