Si bien la lucha contra las llamas aún está lejos de estar ganada en California, el fuego ya está empezando a afianzarse en el terreno político de Estados Unidos. Donald Trump lanzó este domingo un nuevo ataque contra los líderes demócratas de este estado americano, acusándolos de incompetencia en su gestión de los incendios de Los Ángeles.
“Los incendios siguen arrasando en Los Ángeles. Los políticos incompetentes no tienen idea de cómo apagarlos”, dijo el futuro presidente republicano en un mensaje publicado en su plataforma Truth Social. “Este es uno de los peores desastres en la historia de nuestro país. No pueden apagar los incendios. ¿Qué les pasa? “, escribió.
Se difunde información falsa
“Espero con ansias que venga aquí”, respondió el domingo el gobernador de California, Gavin Newsom, en una entrevista en NBC. Desde hace varios días, el hombre considerado una de las esperanzas del Partido Demócrata ha pedido a Donald Trump que vaya a Los Ángeles para comprobar con sus propios ojos los daños y los esfuerzos realizados para apagar los incendios.
El republicano, por su parte, pidió la dimisión del gobernador y difundió información falsa durante la semana, afirmando en particular que California se estaba quedando sin agua debido a las políticas medioambientales demócratas que desviarían el agua de lluvia para proteger a un “pez inútil”. De hecho, la mayor parte del agua que utiliza Los Ángeles proviene del río Colorado y es utilizada principalmente por el sector agrícola.
“No creo que esta información falsa nos esté ayudando. Si respondiera a los insultos de Donald Trump, a lo que estoy acostumbrado, me llevaría meses”, dijo el domingo Gavin Newsom.
El regreso de los vientos violentos
La velocidad y la intensidad de los incendios han puesto a prueba la infraestructura de extinción de incendios y han generado preguntas y críticas sobre la preparación del estado. Las bocas de incendio se han secado en el exclusivo barrio de Pacific Palisades, devastado por uno de los múltiples incendios de la zona, mientras que la escasez de agua también ha obstaculizado los esfuerzos en otros lugares.
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Hasta ahora, los incendios han destruido más de 12.000 estructuras y han matado al menos a 16 personas, según informaron las autoridades el sábado. Continúan ganando terreno el domingo y podrían fortalecerse en las próximas horas, con el regreso previsto de vientos violentos.
