Cuando estás en la gira mundial de Taylor Swift, en los Juegos Olímpicos o en el Super Bowl, no son las amenazas de Donald Trump las que te asustarán. Al menos es con esta mentalidad con la que una empresa quebequense ve el futuro.
“Nos preguntamos cómo vamos a cambiar nuestras operaciones para finalmente realizar un movimiento de judo y salir más fuertes”, afirma Jean-Olivier Dalphond, jefe de gestión comercial de PixMob.
Ofrece su tecnología de iluminación inmersiva a espectadores de diversos eventos, tanto deportivos como culturales, en una treintena de países, de los cuales alrededor del 70% tienen lugar en Estados Unidos.
La buena noticia para la empresa es que las pulseras LED que regala a los espectadores y que se iluminan según las emociones están fabricadas en el Sudeste Asiático y podrían evitar así el arancel del 25% que el presidente electo estadounidense quiere imponer a las exportaciones de Canadá y México. En particular.
“Lo vimos venir, así que desarrollamos una nueva pulsera que puede realizar varios espectáculos. También es más ambiental. Vamos a utilizar muchos menos productos, los vamos a recolectar, dejarlos en Estados Unidos y reenvasar en un taller en Texas”, explica a Diario Señor Dalphond.
Taylor Swift durante su gira “Eras” en Miami en octubre. – Foto MEGA/WENN
El gran desafío
Pone el ejemplo de los dos millones de pulseras de la gira de Coldplay que fueron utilizadas por ocho millones de fans, logrando recuperar entre el 93% y el 95% de los pequeños objetos preciados.
El desafío es, por tanto, recuperarlos cuando miles de espectadores, “a veces ebrios”, abandonan un lugar al mismo tiempo.
“En el festival de música de Glastonbury [en Angleterre]logramos encontrar el 60% de las 150.000 pulseras de Coldplay. Esperábamos más bien un 20 o un 30%. Teníamos 65 empleados para recogerlos. Requiere mucho esfuerzo”, afirma uno de los jefes de PixMob, que colabora en particular con la NHL, NFL, NBA, MLB y LPHF.
No es la primera vez que la empresa de Montreal se enfrenta a impuestos aduaneros. Luego diversificó sus lugares de producción.
“Nos decimos a nosotros mismos que va a suceder. Vamos a dar el siguiente paso y ya no lo negamos”, asegura Dalphond.
Usher fue la estrella del espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LVIII el pasado mes de febrero en Las Vegas. – Foto AFP
Soluciones y creatividad
Y si Trump decide gravar los productos que llegan a través de Canadá o que pertenecen a una empresa canadiense, o los servicios y empleados que ingresan a Estados Unidos, Dalphond solo ve una oportunidad para reinventarse.
“Podremos reclutar estadounidenses y enviaremos canadienses a otros países”, sugiere quien siente mucha empatía por quienes tendrán dificultades para resistir esta reacción.
“Somos muy creativos en Quebec, se nos da bien trabajar con limitaciones porque nunca hemos tenido dinero. No tenemos fondos de inversión que den mil millones de dólares a una empresa. Estamos acostumbrados a salir adelante y tengo la impresión de que a Quebec le irá bien”, afirma con optimismo Dalphond.
Foto proporcionada por JEAN-OLIVIER DALPHOND