En declaraciones a Ouest-France este viernes, la ministra de Educación aseguró que sólo había realizado cambios en los títulos del programa de educación sexual, lo que es objeto de fuertes críticas en los círculos conservadores.
Un proyecto “fuente de progreso” que “cambiará muchas cosas”. Cerca del Oeste de Francia, la ministra de Educación, Anne Genetet, defendió este viernes 29 de noviembre el futuro programa de educación sexual frente a una revuelta conservadora, transmitida al ejecutivo, que alarmó por su contenido.
Anunciado por el ex ministro de Educación Pap Ndiaye e inicialmente previsto para el inicio del año escolar 2024, este proyecto de texto, cuya versión actual no es definitiva, es objeto de consultas desde marzo. Debe ser presentado a mediados de diciembre ante el Consejo de Educación Superior (CSE), órgano consultivo.
Este primer programa de Educación para la vida afectiva, relacional y sexual (Evars) debe responder a la ley que, desde 2001, hace obligatoria la educación sexual en las escuelas, colegios y escuelas secundarias, al menos tres sesiones anuales. De hecho, esta disposición se ha respetado poco hasta ahora.
“Nada que retocar en el fondo”
El programa que actualmente se desarrolla no sólo tiene como objetivo brindar educación sexual a los estudiantes, su principio es educar de manera más amplia a los estudiantes en las relaciones consigo mismos y con los demás, en el respeto a los principios de igualdad entre hombres y mujeres. También habla del consentimiento, la lucha contra la violencia contra las mujeres, la homofobia, la gestión de las emociones y el acoso.
Ministra desde septiembre, Anne Genetet ha hecho algunas correcciones en este programa, explicaron sus allegados a BFMTV. En Ouest-France, sin embargo, aseguró que no había cambiado nada en el contenido del programa. “El texto inicial era equilibrado y respetaba el desarrollo de los estudiantes. No había nada que retocar en cuanto al fondo”, declaró a Ouest-France.
Anne Genetet dice que “simplemente decidió los títulos”. “Para la escuela primaria habrá educación en la vida afectiva y relacional. La sexualidad sólo se abordará en la escuela media, desde 4º grado, y hasta el final de la secundaria, así como en el CAP”, precisó el ministro.
Disonancia dentro del gobierno
La ministra hizo varias aclaraciones esta semana, tras las reservas expresadas por su Ministro Delegado (LR) para el Éxito Académico, Alexandre Portier. Este último estimó el miércoles ante el Senado que “este programa, tal como está, no es aceptable” y que “debe ser revisado”. También aseguró que se “comprometería personalmente a que la teoría de género no encuentre su lugar en nuestras escuelas, porque allí no debería tener su lugar”.
“Teoría de género” es una expresión utilizada por un segmento conservador de la sociedad que se preocupa por que los estudios y las enseñanzas abran una percepción matizada de las diferencias entre los sexos. En el borrador del programa que BFMTV pudo consultar, la noción de “identidad de género” sólo aparece a partir del quinto grado.
Un programa “esencial”
Tras las declaraciones de Alexandre Portier, varias organizaciones denunciaron el jueves esta ofensiva contra el texto, insistiendo en su papel “esencial” en la lucha contra la violencia sexual. En el programa de construcción esto implica un enfoque gradual. El objetivo es, por ejemplo, que los niños, a partir de los 4 años, aprendan a “identificar a los adultos de confianza, aprender a llamarlos”. La cuestión de la sexualidad no aparece antes de la secundaria. El plan de estudios del CM2 debe simplemente perseguir “un objetivo de prevención, particularmente en el contexto de la lucha contra la violencia sexual y sexista”.
“Quiero dejar claro que no habrá educación sexual en la guardería ni en la escuela primaria. Se hablará de emociones, de respeto por los demás y de convivencia”, explicó Anne Genetet a Ouest-France el viernes.
La Ciivise (Comisión Independiente sobre el Incesto y la Violencia Sexual contra los Niños) denunció las “informaciones falsas” de los opositores a este programa mientras “160.000 niños son víctimas de incesto y violencia sexual cada año”. El colectivo “por una verdadera educación sexual”, del que forma parte Le Planning Familial o Sidaction, denunció “el uso de retórica” destinada a “impedir el éxito de este proyecto esencial”.
Entre los gremios docentes, la SE Unsa también subrayó la “necesidad de claridad y valentía ministerial”. Sud Education y la CGT Educ’action llaman al ministro a “no dar marcha atrás”. Sophie Vénétitay, secretaria general del Snes-FSU, el principal sindicato de escuelas secundarias y superiores, calificó la declaración del ministro del jueves como “bienvenida” “para aclarar la posición del ministerio”.