El Dow Jones perdió un 0,47%, el índice Nasdaq ganó un 0,57% y el índice S&P 500 un 0,25%.
La Bolsa de Nueva York abrió el martes con resultados mixtos, asimilando el anuncio de Donald Trump, que promete importantes aranceles aduaneros para varios de los principales socios comerciales de Estados Unidos, pero sin alarmarse francamente.
Alrededor de las 14:50 GMT, el Dow Jones cayó un 0,47%, el índice Nasdaq ganó un 0,57% y el índice S&P 500 un 0,25%.
El presidente electo Donald Trump indicó el lunes que tenía la intención de imponer aranceles aduaneros del 25% a los productos importados a Estados Unidos desde Canadá y México, así como agregar un 10% a los impuestos aduaneros para los bienes provenientes de China.
Justificó esta decisión por la necesidad de presionar a estos tres países para que hagan más para luchar contra los flujos de drogas desde su territorio hacia Estados Unidos.
“El entusiasmo (nacido de las elecciones presidenciales) no se ha evaporado del todo, pero se ha calmado un poco esta mañana tras esta nueva decisión del presidente electo Trump”, comentó Patrick O’, en una nota de Briefing.com.
Sin embargo, el mercado neoyorquino no mostró signos de nerviosismo. El índice VIX, que mide la ansiedad de los inversores, incluso bajó.
Otro indicador: la mayoría de las acciones de grupos canadienses, mexicanos o chinos se movían dentro de márgenes estrechos, a menudo al alza.
“El mercado espera más claridad” sobre estos nuevos derechos de aduana, explicó Adam Sarhan, de 50 Park Investments.
“Sabemos que se avecinan nuevos derechos de aduana, pero aún no sabemos cuáles serán exactamente”, continúa el directivo.
“Mientras no sea completamente diferente de lo que espera el mercado, vivirá con ello, porque la economía (estadounidense) seguirá creciendo, al igual que los beneficios empresariales”, describe Adam Sarhan. “Es por eso que las acciones siguen en una tendencia alcista”.
Esta noticia también dejó al mercado de bonos relativamente impasible. El rendimiento de los bonos gubernamentales estadounidenses a dos años se mantuvo sin cambios en el 4,27%.
Wall Street estaba a la espera de la publicación de las actas de la última reunión de política monetaria del banco central estadounidense (FED).
En el mercado, la plataforma de videoconferencia Zoom cayó (-5,07%) a pesar de unos resultados superiores a las expectativas y del aumento de sus previsiones anuales. El grupo fue objeto de una toma de beneficios después de haber subido más del 60% desde mediados de agosto.
La empresa, que se ha convertido en parte del lenguaje cotidiano desde la pandemia de coronavirus, pretende centrar la atención en la inteligencia artificial, en particular con su nuevo asistente virtual AI Companion.
El laboratorio Amgen retrocede (-9,87%), a pesar de los resultados de su estudio clínico sobre el antiobesidad MariTide, que mostró una pérdida de peso de alrededor del 20% después de 52 semanas. Los inversores esperaban más y, sin embargo, tienen dudas sobre las posibilidades de éxito de este nuevo tratamiento en un mercado que ya está muy saturado.
La marca de grandes almacenes Kohl’s cayó (-20,66%) tras registrar su décimo trimestre consecutivo de descenso de su facturación. “Kohl’s está en mal estado, más aún en un mercado difícil”, marcado por la cautela del consumidor, comentó Neil Saunders de GlobalData. “El resultado es que son castigados”.
El grupo también anunció la salida, en enero, de su director general, Tom Kingsbury.
Aún en el sector de la distribución, la cadena de tiendas de electrónica de consumo Best Buy también falló (-9,31%) y rebajó sus previsiones anuales, y su directora general, Corie Barry, informó de “una demanda inferior a la esperada”.
La casa de prêt-à-porter Abercrombie & Fitch sufrió una recogida de beneficios a pesar de unos resultados mejores de lo previsto, impulsada en particular por su marca Hollister.