Y sobre todo discutir las diferentes alternativas terapéuticas para la esquizofrenia en 2025.
1. El glutamato :
Hasta ahora, como sistemas cerebrales que pueden explicar los síntomas esquizofrénicos, sólo los llamados sistemas dopaminérgicos (receptor de dopamina D2) y serotoninérgicos (receptor de serotonina 5-HT2A) han atraído la atención de los investigadores.
Los medicamentos que utilizan estos sistemas han demostrado ser eficaces contra los llamados síntomas positivos de la esquizofrenia, es decir, síntomas delirantes y trastornos del comportamiento. Por otro lado, no han demostrado suficiente eficacia sobre los llamados síntomas negativos de la enfermedad como el aislamiento social y los déficits cognitivos.
Para superar este grave problema, la investigación en este ámbito avanza hacia el llamado sistema NDMA, en el que el glutamato parece desempeñar un papel en la génesis de los síntomas esquizofrénicos, especialmente los síntomas negativos. Algunos resultados parecen prometedores, especialmente en animales, pero la transposición a humanos todavía no ha mostrado resultados convincentes, en su forma actual.
Sin embargo, el receptor cerebral de glutamato mGlu2 (mGluR2) sigue siendo el principal objetivo de una nueva generación de antipsicóticos, actualmente en fase de ensayos clínicos, que intenta tratar eficazmente todos los síntomas de la esquizofrenia sin causar efectos secundarios notables.
2. Nanocuerpo: Los anticuerpos monocatenarios de llama (los llamados nanocuerpos) en realidad se dirigen específicamente a mGluR2 para purificar el receptor endógeno y sus interactores de la corteza prefrontal del ratón, una región del cerebro que se sabe que expresa fuertemente mGluR2 pero que también se altera fuertemente en la esquizofrenia. No constituyen una vía de investigación terapéutica pero se utilizan para facilitar los efectos terapéuticos de los fármacos a base de glutamato.
Una innovación consiste en el uso de “nanocuerpos”, pequeñas proteínas derivadas de anticuerpos, capaces de atravesar la barrera hematoencefálica.
Estos tratamientos podrían proporcionar efectos duraderos después de una sola inyección, con resultados preliminares prometedores en ratones.
Sin embargo, su desarrollo aún requerirá varios años.
3. Estimulación magnética transcraneal repetitiva (EMTr): (Se utiliza en la Villa des Lilas desde hace unos diez años)
La rTMS (estimulación magnética transcraneal repetida) es una técnica terapéutica innovadora que se basa en el uso de campos magnéticos para modular la actividad cerebral.
Desde hace varios años, la rTMS ha sido objeto de un interés creciente en el tratamiento de enfermedades neurológicas y psiquiátricas, particularmente porque es una herramienta terapéutica no invasiva.
Muy recientemente se ha desarrollado un nuevo tipo de rTMS, llamado theta burst, que consiste en administrar una serie de pulsos cortos a muy alta frecuencia, con la ventaja de una duración más corta del tratamiento. Esta técnica, aplicada a la corteza prefrontal dorsolateral izquierda, parece eficaz en el tratamiento de pacientes con esquizofrenia, y no en otros tipos de EMTr, según un metaanálisis japonés.
4. Terapias digitales:
En pacientes que sufren alucinaciones auditivas, la terapia digital utilizando un avatar para encarnar las voces que escuchan ayuda a reducir la angustia que generan.
Las alucinaciones verbales auditivas son comunes en pacientes con esquizofrenia y a menudo les causan angustia y perjudican su calidad de vida.
Las terapias digitales están surgiendo como vías interesantes en particular en psiquiatría, como la terapia avatar. En particular, para los pacientes que escuchan voces, se trata de encarnarlas en un avatar representado en una pantalla con el que es posible comunicarse.
Los estudios iniciales han sugerido que este enfoque, combinado con una terapia de apoyo, puede reducir la gravedad de las alucinaciones cuando lo llevan a cabo terapeutas capacitados en un entorno de investigación.
4. Realidad virtual:
Los entornos virtuales no agravan los síntomas de los esquizofrénicos como solemos pensar, pero brindan la posibilidad de desarrollar nuevas herramientas terapéuticas, en particular solicitando su capacidad de actuar intencionalmente sobre sí mismos, sobre los demás y sobre su entorno.
El uso de estas nuevas técnicas sigue siendo marginal en el tratamiento de patologías como la esquizofrenia, en particular debido a los riesgos, evaluados de diversas formas, de una pérdida de realidad en el sujeto.
Sin embargo, si bien estas técnicas actualmente son poco utilizadas en el tratamiento (y la comprensión) de la esquizofrenia, representan, más que una simple vía, más que una simple hipótesis de investigación, un potencial terapéutico indiscutible.
5. Genética e imágenes cerebrales:
Los avances en genética y en imágenes cerebrales están ayudando a comprender mejor la esquizofrenia en su contraparte orgánica y a perfeccionar los tratamientos según las características específicas de cada paciente, centrándose en sus necesidades y limitando los efectos secundarios.
Si bien estas innovaciones son prometedoras, su integración clínica requerirá validaciones científicas rigurosas e inversiones considerables, así como la comprensión de la enfermedad en su psicopatología, lo que sin duda será de cierto beneficio.
La esquizofrenia sigue siendo una patología compleja que requiere un enfoque multidimensional que combine medicamentos, psicoterapia y apoyo psicosocial.