China dijo el miércoles que esperaba una “coexistencia pacífica” con Estados Unidos en un momento en que las proyecciones daban la probable victoria de las elecciones presidenciales estadounidenses a Donald Trump contra Kamala Harris.
“Seguiremos abordando y gestionando las relaciones entre China y Estados Unidos sobre la base de los principios de respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación mutuamente beneficiosa”, dijo la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Mao Ning, en una rueda de prensa habitual.
De acuerdo con los hábitos de la diplomacia china, no comentó directamente sobre la posibilidad de una reelección de Donald Trump.
“Respetamos la elección del pueblo estadounidense”, independientemente del resultado de la votación, se limitó a declarar.
Cuando se le preguntó si el presidente chino, Xi Jinping, llamaría a Donald Trump para felicitarlo, dijo que China actuará “de acuerdo con las prácticas habituales” y “después de que los resultados sean publicados y anunciados oficialmente”.
Como en todas partes, las elecciones fueron seguidas de cerca en China.
En la red social china Weibo, similar a X, varios temas relacionados con la victoria de Donald Trump estuvieron entre los más discutidos en la plataforma.
“¡Felicitaciones a Donald Trump! Concéntrate en construir tu hermoso país y deja de pensar en entrometerte en los asuntos de otras naciones”, escribió un usuario.
Ambos candidatos hicieron campaña con promesas de ser más duros con Beijing, y Donald Trump prometió imponer aranceles del 60% a todos los productos chinos que ingresen al país.
“Comienza la guerra comercial”, escribió un usuario de otra red social china, Xiaohongshu, el equivalente chino de Instagram.
“Mi familia trabaja en negocios internacionales y su mundo simplemente se vino abajo”, escribió otro usuario en Douyin, la versión china de TikTok.
Relaciones tensas
Los analistas esperan que un gran plan de recuperación económica, discutido esta semana en una reunión del parlamento chino, sea más importante en caso de una victoria de Donald Trump.
China nunca comenta sobre las campañas electorales de otros países, diciendo que no quiere interferir en sus asuntos internos. Pero se opone a que la mencionen como opositora en temas de campaña.
Durante su primer mandato, Donald Trump lanzó una amarga guerra comercial con China, imponiendo aranceles muy altos a los productos chinos.
Dijo que estaba actuando como reacción a lo que consideraba prácticas desleales por parte de Beijing, acusándolo de robo de tecnología estadounidense y manipulación de la moneda china.
Bajo su sucesor Joe Biden, las relaciones alcanzaron su punto más bajo en décadas, después de que Washington impusiera nuevos aranceles elevados a los vehículos eléctricos, baterías de vehículos eléctricos y células fotovoltaicas chinos.
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