El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció el lunes que permanecería en el cargo. El líder socialista indicó la semana pasada que estaba pensando en su futuro político tras la apertura de una investigación judicial contra su esposa, sospechosa de corrupción.
Acostumbrado a los arrebatos y las jugadas de póquer, Pedro Sánchez sorprendió a España al poner en juego su dimisión este miércoles tras el anuncio por un juzgado de Madrid de la apertura de una investigación previa por tráfico de influencias y corrupción contra su esposa, Begoña Gómez.
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“Necesito detenerme y pensar” para decidir “si debo seguir al frente del gobierno”, escribió en una carta de cuatro páginas publicada en la red social X.
Manifestación de apoyo el sábado
Desde entonces, sin precedentes, Pedro Sánchez ha suspendido todas sus actividades públicas cuando debía lanzar la campaña regional del 12 de mayo en Cataluña el jueves por la noche, unas elecciones nacionales en las que su Partido Socialista espera expulsar a los separatistas del poder.
Gritando “¡Pedro, quédate!”, miles de simpatizantes se reunieron frente a la sede del Partido Socialista en Madrid el sábado para pedirle al Primer Ministro que no abandonara su cargo.
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amigo con agencias
