Nota del editor: John Legend, oriundo de Springfield y un artista aclamado a nivel internacional, recurrió a las redes sociales el 12 de septiembre para abordar la reacción contra los inmigrantes haitianos promovida por el candidato presidencial republicano Donald Trump y su compañero de fórmula, el senador estadounidense JD Vance de Middletown. Su declaración se encuentra a continuación.
Mi nombre es John Legend y nací como John R Stevens, de un lugar llamado Springfield, Ohio. Springfield, Ohio: es posible que hayas oído hablar de Springfield, Ohio, esta semana.
De hecho, si ves el debate, nuestros candidatos presidenciales hablaron de nosotros, incluido un hombre muy especial e interesante llamado Donald J. Trump.
Ahora, Springfield ha tenido una gran afluencia de inmigrantes haitianos que vienen a nuestra ciudad.
Nuestra ciudad se había ido reduciendo durante décadas. No teníamos suficientes puestos de trabajo ni oportunidades, así que la gente se fue a otro sitio.
Entonces, cuando estuve allí, teníamos más de 75.000 personas y en los últimos cinco años bajamos a unas 60.000 personas.
Pero últimamente, durante la administración Biden, se han abierto más puestos de trabajo: más puestos de trabajo en el sector manufacturero, más plantas, fábricas que necesitaban empleados y estaban listas para contratar gente.
Entonces, teníamos muchas oportunidades de trabajo y no teníamos suficiente gente en nuestra ciudad de 60.000 habitantes para cubrir esos puestos.
Y al mismo tiempo, ha habido agitación y disturbios en Haití. El gobierno federal otorgó visas y estatus migratorio a un cierto número de inmigrantes haitianos para que pudieran venir a nuestro país legalmente.
Nuestra demanda de mano de obra adicional en Springfield se encontró con la oferta de más inmigrantes haitianos y aquí estamos.
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No 'Fluffy asado'.Los haitianos no comen gatos en Springfield. Vance es un mentiroso.
Tuvimos aproximadamente 15.000 inmigrantes que se mudaron a mi ciudad de 60.000 habitantes. Se podría decir: “Vaya, es mucha gente para una ciudad que antes solo tenía 60.000 habitantes. Eso es un aumento del 25 %”.
Eso es correcto.
Así que se puede imaginar que existen algunos desafíos a la hora de integrar una nueva población.
Un nuevo idioma, una nueva cultura, nuevas preferencias alimentarias… Hay todo tipo de razones por las que puede haber dificultades para crecer.
Asegurarse de que haya suficientes servicios para dar cabida a la nueva población más grande que podría necesitar proveedores de servicios bilingües, etc.
Hay muchas razones por las que esto podría ser un desafío para mi ciudad natal.
Pero la conclusión es que estas personas vinieron a Springfield porque había trabajo para ellos y estaban dispuestos a trabajar.
Querían vivir el sueño americano, igual que sus antepasados alemanes, irlandeses, italianos, judíos, jamaicanos, polacos… todos esos antepasados que se mudaron a este país.
Quizás no hable el idioma que todos los demás hablan.
Quizás no comamos los mismos alimentos.
Quizás tenga que adaptarse.
Quizás tener que integrarse.
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Pero todos vinieron porque vieron una oportunidad para ellos y sus familias en el sueño americano.
Y vinieron aquí para hacer eso.
Algunos datos sobre los inmigrantes: aquí suelen tener muy buena suerte.
Son muy trabajadores.
Son ambiciosos.
Cometen menos delitos que los estadounidenses nativos, y se asimilarán y se integrarán con el tiempo, pero lleva tiempo. Así que creo que todos debemos tener el mismo tipo de gracia que quisiéramos que tuvieran nuestros antepasados cuando se mudaron aquí con nuestros hermanos y hermanas haitianos.
Nadie come gatos.
Nadie come perros.
Todos solo queremos vivir, prosperar y criar a nuestras familias en un entorno saludable y seguro.
¿Qué tal si nos amamos unos a otros? Crecí en la tradición cristiana que decía que hay que amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos y tratar a los extraños como si fueran Cristo.
Entonces, ¿qué tal si adoptamos ese espíritu cuando hablamos de los inmigrantes que se mudan a nuestras comunidades y no difundimos mentiras odiosas, xenófobas y racistas sobre ellos?
John R. Stevens de Springfield se despide.
