En la ventana, un cartel advierte: “Reconocimiento facial en progreso. Para proteger a nuestros empleados, nuestros clientes, nuestra propiedad. » En la entrada de la tienda Sports Direct en Stoke Newington, una zona residencial del noreste de Londres, se ve claramente la bola negra que oscila sobre una base blanca. En el Reino Unido, país cuya capital alberga la mayor densidad de cámaras de vigilancia del mundo fuera de China, el reconocimiento facial se está generalizando: 97 por 1.000 habitantes frente a 2,1 por 1.000 habitantes en París. según cifras de la empresa de seguridad británica Clarion Security Systems y, para Francia, del Ministerio del Interior.
“Hace no mucho tiempo, esta tecnología estaba reservada a los cuerpos policiales, señala Daragh Murray, especialista en nuevas tecnologías y derechos humanos de la Universidad Queen Mary de Londres. Pero en los últimos dos años ha experimentado una expansión espectacular en el sector privado. » Actualmente se utiliza en supermercados, en la entrada de discotecas e incluso en espacios públicos.
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