Los consumidores también quieren elegir alimentos de forma más consciente y el 50% de los belgas elegirán con más frecuencia alternativas de origen vegetal. En concreto, un 30% cocinará o pedirá más platos vegetarianos, mientras que un 20% cocinará o pedirá más platos veganos. Esta tendencia también se observa en el comportamiento de pedidos actual de los clientes de Takeaway.com: el 39% de los pedidos son vegetarianos, mientras que el 16% son veganos.
“Vemos el deseo de una alimentación más saludable, pero persisten los obstáculos. Los belgas quieren comer mejor, pero citan el coste de los productos y alimentos orgánicos como el principal desafío. Muchos creen que comer sano, local y sostenible es demasiado caro. C “Por eso ofrecemos Opciones saludables a un precio asequible es esencial para los restaurantes y empresas de alimentos”.comenta el observador de tendencias Bert Van Thilborgh.
De hecho, los principales factores que influyen en la elección de alimentos en los supermercados son el precio (74%), la frescura (65%) y las promociones/reducciones (57%).
3 de cada 10 belgas realizarán sus compras únicamente “online”
Además, el estudio destaca que la comodidad es uno de los principales criterios a la hora de elegir la compra de alimentos. Las compras en línea están aumentando y 3 de cada 10 belgas (29,9%) planean comprar alimentos únicamente en línea en la próxima década. Esto demuestra una nueva evolución hacia las plataformas digitales, impulsada por las generaciones más jóvenes. Son especialmente las generaciones más jóvenes, de entre 18 y 34 años, las que desean visitar su supermercado online (40%). Geográficamente, los bruselenses (40%) también se muestran más entusiasmados con esta cuestión.
La segunda tendencia destacada este año se refiere a las dietas centradas en el bienestar. De hecho, los belgas consideran su alimentación no sólo como un elemento funcional, sino también como un elemento esencial para cuidarse (80%) y sentirse bien mentalmente (79%). También sorprende que muchos consumidores elijan sus alimentos en función de su estado de ánimo.
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La demanda de nutrición personalizada, incluidos suplementos y alimentos funcionales, también está aumentando a medida que los consumidores se vuelven más abiertos a opciones que promuevan la belleza y el bienestar. El interés por los alimentos enriquecidos (41%) está aumentando, especialmente entre los consumidores más jóvenes.
También se desarrollan nuevos hábitos, aunque las clásicas raclettes, barbacoas y aperitivos de verano siguen estando bien arraigadas. Las bebidas sin alcohol, por ejemplo, están ganando popularidad: casi la mitad (49%) de los belgas, especialmente los jóvenes (61%) y los holandeses (53%), planean consumir más cócteles sin alcohol, cervezas sin alcohol y kombucha.
El estudio también revela que uno de cada cinco belgas está dispuesto a comer hamburguesas hechas con insectos y el 23% consideraría comer carne cultivada. Además, al 26% le gustaría hacerse una prueba de ADN para determinar qué dieta le conviene más y recibir asesoramiento dietético personalizado.
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