En un vuelo de Ryanair entre Milán y Valencia, un hombre trastornó la tranquilidad de los demás viajeros. Luego el avión dio media vuelta para sacarlo.
Las vacaciones no suelen empezar en el avión, salvo para este español que pensó que estaba en una coctelería, informa el semanario español El Caso. El viajero de camino a Milán, en un vuelo procedente de Valencia, se permitió encender un cigarrillo y permanecer de pie como si estuviera en la terraza de un bar. Tras media hora de vuelo, tras intentar hacer entrar en razón con él, los tripulantes decidieron darse la vuelta y sacar al hombre del avión.
Expulsado del avión por la Guardia Civil, el hombre que parecía estar ebrio desembarcó “sin más incidentes”, según el semanario. Pero tendrá que esperar para ver Milán ya que el Boeing 737-8AS, del que fue sacado, se fue sin él. El avión también llegó a su destino con cien minutos de retraso.
Riesgos de fuertes sanciones
El Caso no indica si el viajero amotinado ha sido arrestado o detenido ni si será procesado. Lo que sí es cierta es la prohibición total de fumar en un avión desde el año 2000 y su adopción por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).
Las normas son casi las mismas para la mayoría de las compañías aéreas, incluida Air France, según la revista científica Me interesa. Normalmente, las personas que son sorprendidas fumando reciben una advertencia verbal. También se puede imponer una multa de 10.000 euros y la prohibición de volar en un avión de la empresa durante dos años. En los casos más graves, se presenta una denuncia a las autoridades, lo que puede dar lugar a acciones legales.
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