El coche eléctrico que podría costarte la vida

El coche eléctrico que podría costarte la vida
El coche eléctrico que podría costarte la vida
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La quiebra de Fisker no sólo causa pérdidas financieras. Destaca problemas de diseño potencialmente fatales. Esta es la historia de un propietario francés que podría haber acabado mal. Hablamos con él por teléfono y nos compartió su pesadilla.

Océano Fisker // Fuente: Frandroid

Imagínese atrapado en su auto nuevo, sin poder salir, con el aire acondicionado apagado, bajo un sol abrasador. No, este no es el argumento para una nueva película de terror, sino la realidad que viven algunos propietarios de Fisker Ocean. La reciente quiebra de la empresa no hace más que empeorar una situación ya alarmante, dejando a sus clientes enfrentándose a problemas de seguridad potencialmente mortales.

Una pesadilla hecha realidad

La escalofriante historia compartida este fin de semana por el propietario de Fisker Ocean ilustra perfectamente la magnitud del problema. Él y su hija se encontraron literalmente atrapados en su vehículo, sin poder abrir las puertas ni bajar las ventanillas. La causa ? A priori, un simple fallo de la batería de 12 voltios, que se supone alimenta los sistemas eléctricos básicos.

« Abrí mi auto con la llave, se salieron las manijas (normal), abrí la puerta, me subí a mi auto, cerré la puerta, encendí el auto, encendió, luego se apagó todo. Las puertas estaban cerradas con llave, pero las manijas exteriores estaban afuera. No se pueden abrir puertas ni bajar ventanas“, dice, todavía en shock.

¿Lo más preocupante? Incluso la solución de emergencia mecánica planeada por Fisker no funcionó. Sin la ayuda de la marca, ahora en liquidación, el propietario se encontró completamente desamparado. Finalmente tuvo que llamar a los bomberos para que rompieran la luneta trasera, le fue imposible hacerlo directamente.

Desgraciadamente este caso no es un caso aislado. Otros propietarios informan de experiencias similares, señalando un problema recurrente con la descarga de la batería de 12 V. Un fallo que convierte a estos coches en auténticas trampas mortales.

« El verdadero problema no es la descarga de la batería, sino el hecho de que no existe una solución mecánica para abrir el coche una vez cerrado y con batería de 12v HS. ¿Qué pasaría en un accidente? ¿Estamos ardiendo en él?“, pregunta con razón nuestro testigo.

Clientes abandonados, autoridades silenciosas

La quiebra de Fisker no hace más que empeorar la situación. Sin servicio posventa, sin asistencia técnica, los propietarios se encuentran abandonados a su suerte. Incluso Speedy, que se suponía debía proporcionar el mantenimiento, ahora se niega a hacerse cargo del Fisker Ocean por temor a que no le paguen.

Ante este desastre, algunos clientes no tienen más remedio que abandonar su vehículo. “ ¿De verdad crees que, como padre responsable, puedes conducir un coche que se puede cerrar en cualquier momento sin que puedas salir?“, explica nuestro testigo, ahora decidido a no volver a subirse nunca más a su Fisker.

Pero más allá de las tragedias individuales, se cuestiona toda la cadena de control y aprobación. ¿Cómo pudo un vehículo así obtener autorización para circular en Europa? ¿Quién ha validado un sistema que no permite la apertura mecánica de las puertas en caso de fallo eléctrico?

Para los propietarios de Fisker Ocean, el futuro parece complicado. Sin el apoyo de la marca, con importantes problemas de seguridad sin resolver, muchos corren el riesgo de terminar con un vehículo inutilizable y potencialmente peligroso.

Esta historia debería servir como advertencia para toda la industria automotriz. Mientras tanto, si posee un Fisker Ocean, se recomienda precaución. Y para otros, este percance nos recuerda la importancia de obtener la información adecuada antes de comprar un vehículo, especialmente si se trata de una marca nueva en un mercado en rápida evolución.


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