Después del fabricante de cables submarinos de telecomunicaciones, ASN, el Estado nacionalizará otra actividad estratégica. El Ministerio de Economía anunció, el lunes 25 de noviembre, “la apertura de conversaciones exclusivas con Atos destinadas a adquirir todas sus actividades de Computación Avanzada”por un valor empresarial de 500 millones de euros, que potencialmente podría incrementarse hasta 625 millones incluyendo suplementos de precios. Tras una fase de auditoría que debería durar un mes, se firmará un contrato de transferencia vinculante entre Atos y la Agencia de Participación Estatal.
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Esta división fabrica supercomputadoras (informática de alto rendimientoHPC), ordenadores extremadamente potentes que se utilizan para aplicaciones civiles, como la previsión meteorológica o la investigación científica, pero también militares. Así, la Comisión de Energía Atómica y Energías Alternativas utiliza los HPC de Atos para realizar cálculos de simulación nuclear. “Es papel del Estado garantizar, como accionista cuando esté justificado, la sostenibilidad y el desarrollo de las actividades industriales más estratégicas para nuestra soberanía”declaró Antoine Armand, ministro de Economía, Finanzas e Industria.
La actividad de Computación Avanzada de Atos emplea a más de 2.500 personas, principalmente en Francia, en particular en la fábrica de Angers, donde se ensamblan los superordenadores. Actualmente el sitio se está ampliando. Esta división alcanzó una facturación de alrededor de 570 millones de euros en 2023.
Productos de ciberseguridad a punto de venderse
El acuerdo con el Estado también prevé que Atos se comprometa a poner en marcha un proceso de desinversión de sus actividades de productos de ciberseguridad y sistemas críticos, cuya facturación representa 340 millones de euros. En abril, las primeras conversaciones iniciadas con el industrial preveían que el Estado adquiriría también estas actividades, además de los superordenadores, con el apoyo de uno o más industriales, por un valor total de entre 700 millones y mil millones de dinares. Pero las negociaciones fracasaron. La venta por separado de las dos divisiones pretende facilitar la operación.
Estos productos de ciberseguridad y sistemas críticos también son muy sensibles, como C4I (« mando, control, comunicaciones, informática e inteligencia ») que proporciona a la cadena de mando de los ejércitos franceses un mapa del campo de batalla en tiempo real. En esta actividad también se desarrolló el módulo de seguridad de comunicaciones Rafale. Su transferencia “estará liderado por Atos (…) sobre la base de una lista de posibles compradores aprobada por el Estado »especifica el Ministerio de Economía.
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