Según el Tribunal de Cuentas, las deducciones fiscales y sociales de las que se beneficia el ahorro para la jubilación “representan un coste importante para las finanzas públicas”, estimado en 1.800 millones de euros en 2022.
El Tribunal de Cuentas sugiere reducir la ventaja fiscal ligada al ahorro para la jubilación -o jubilación por capitalización- que hoy beneficia principalmente a los hogares ricos que buscan una optimización fiscal, con un coste elevado para el Estado. Según el Tribunal de Cuentas, los ahorros para la jubilación siguen siendo “modestos” en Francia y representan sólo “el 5,1% de las cotizaciones a las pensiones y el 2,3% de las prestaciones”. Pero las deducciones fiscales y sociales de las que se beneficia “representan un coste importante para las finanzas públicas”, estimado en 1.800 millones de euros en 2022, señala.
En su formato actual, representa “sobre todo un instrumento de inversión y ahorro, cuya fiscalidad ventajosa permite a los ahorradores ricos y relativamente mayores beneficiarse de ventajas fiscales”, según el Tribunal. En “un contexto presupuestario muy restringido”, “sería deseable un endurecimiento de este régimen, para evitar ciertos excesos que desvían a los sistemas de su función de preparación para la jubilación”, escribe.
Un sistema “lejos de ser generalizado”
El ahorro para la jubilación permite ahorrar durante la vida laboral, tener recursos disponibles en la edad de jubilación para complementar las pensiones proporcionadas por los regímenes obligatorios y complementarios. En 2022, el ahorro para la jubilación recaudó 18.500 millones de euros en aportaciones, mientras que el saldo pendiente (el total de los fondos gestionados por las distintas entidades de ahorro para la jubilación) fue de 292.700 millones de euros.
“El sistema está lejos de ser generalizado”, señala el Tribunal. Sólo el 13% de los activos tienen un plan de ahorro para la jubilación de la empresa y el 10% un producto individual, y a veces son lo mismo, ya que es posible tener ambos productos al mismo tiempo. El Tribunal de Cuentas señala también que “todavía es posible avanzar en términos de transparencia de las comisiones de gestión”, ya que los ahorradores individuales ven su ventaja fiscal capturada “en parte” por la acumulación de comisiones deducidas de su inversión.
En el lado del financiamiento de la economía, el Tribunal observa que a pesar de la reforma que tuvo lugar en 2019 en la ley Pacte, los fondos de ahorro para el retiro financian insuficientemente a las empresas. Propone que este capital se destine más a las “PYME/ETI (medianas empresas), como anima a hacer la Ley de Industria Verde de 2023”, señala el Tribunal.