La tan esperada puesta en marcha de las nuevas líneas de tranvía (T3 y T4), prevista para el próximo mes de junio, está generando preocupación entre los ciudadanos. La puesta en funcionamiento de estas líneas, acompañada de un aumento de los precios de los billetes para compensar el déficit presupuestario, está en el centro de las discusiones entre los habitantes de Casablanca, aunque este aumento no excederá de 1 dh, según los funcionarios.
Aumentar el precio de los billetes para paliar el déficit presupuestario es la solución que el municipio de Casablanca ha decidido aplicar a partir de la puesta en marcha de las dos nuevas líneas (T3 y T4) el próximo mes de junio.
Con un déficit anual que supera los 100 millones de dírhams, la primera y la segunda línea de tranvía requieren una atención especial para garantizar su viabilidad financiera a largo plazo.
Para ello, el municipio aporta una contribución que oscila entre el 30% y el 40% del precio del billete actualmente fijado en 6 dirhams. Además, se concede una subvención anual de 200 millones de dírhams al transporte público para no afectar al poder adquisitivo de los ciudadanos.
Durante una conferencia reciente, Nabila Rmili, alcaldesa de la metrópoli, reveló que “ Se realizarán ajustes en el precio del billete de tranvía para contrarrestar el déficit presupuestario provocado por las nuevas líneas de tranvía y autobús. “. Enfatizó, en este sentido, que “ el municipio no puede hacerse cargo por sí solo de los costes de funcionamiento de las seis líneas, sobre todo teniendo en cuenta que el primer y el segundo tramo registran un déficit anual superior a los 100 millones de dírhams“.
Para remediar esta situación, el ayuntamiento tiene previsto aumentar el precio de los billetes de tranvía, dada la costosa contribución del municipio al transporte público, una carga insostenible dada la deuda acumulada. Este aumento se considera la única solución para resolver el déficit, a pesar de los esfuerzos del Ministerio del Interior para evitar aumentar la carga sobre los ciudadanos, que ya sufren debido a la inflación.
El precio del billete, actualmente fijado en 6 dirhams, se beneficia de una contribución municipal del 30 al 40%. Sin embargo, algunos activistas rechazan este aumento, argumentando que perjudicaría los intereses de los ciudadanos.
Es pertinente señalar que Rmili había señalado anteriormente que el coste real del billete de tranvía es de 10 dírhams, mientras que los viajeros pagan actualmente sólo 6 dírhams, siendo la diferencia cubierta por la ciudad, práctica similar para las líneas de autobuses.
