Hubo un tiempo en Europa en el que la gran moda era quedarse encerrado en una tienda Ikea y dormir allí hasta que abrieran las puertas al día siguiente. Un desafío que causó mucho ruido en un momento en el que circulaban por las redes sociales vídeos con decenas de miles de visualizaciones en los que personas resumían su viaje nocturno a Ikea. En 2016, el gigante sueco contabilizó más de 1.300 pernoctaciones ilegales en sus distintos establecimientos repartidos por todo el mundo. Hoy en día, si esta moda ha pasado, mucha gente ya se ha preguntado cómo sería pasar una noche en el decorado de una de las tiendas de la famosa casa sueca. Dos establecimientos belgas hacen posible la experiencia. De hecho, la cadena hotelera YUST, que combina hotel, restaurante y coworking, ofrece hasta el 30 de junio dos habitaciones decoradas con los colores IKEA, en estilo retro.
En vídeo, zoom sobre el método IMC:
Los dos hoteles en cuestión están uno en Berchem, a sólo diez minutos en tranvía de la estación central de Amberes; el otro en Valonia, en Lieja, a dos pasos de la estación de Guillemins. Por nuestra parte, nos decantamos por la suite para dos personas del establecimiento flamenco, amueblada en tonos verdes, azules y negros, en Berchem.
Y la experiencia fue bastante agradable: en primer lugar, porque sí, se vive bien en una decoración sueca con muebles y objetos decorativos de la casa. Pero, sobre todo, porque aquí no hay riesgo de ser sorprendidos por los guardias de seguridad, como les sucedía a quienes se habían arriesgado a probar este tipo de experiencias en una tienda Ikea en la época. Más allá de eso, lo que nos gustó especialmente fue la inmersión en el tiempo porque las piezas elegidas provienen de una colección (Nytillverkad) inspirada en los años 70. A esto se suman algunos elementos de decoración de otras procedencias: papel pintado y vinilos en particular, pero también piezas. de vajillas y decoración de la casa belga Serax, entre otros.
Es bueno saberlo: ambos hoteles también ofrecen una habitación familiar con capacidad para 6 personas, decorada en tonos naranja y marrón.
¿Veredicto?
Disfrutamos esta velada en modo retro, con el confort moderno. Y no nos dejemos engañar, el objetivo es evidentemente también promocional: in situ, mediante un código QR, podemos acceder directamente al catálogo y a la información sobre las piezas expuestas. Y lo admitimos: nos enamoramos de uno de ellos: un sillón vintage. Una elección motivada en parte por el hecho de que tuvimos la oportunidad de probarlo durante más tiempo e in situ, en cualquier caso, ¡más de lo que le hubiéramos dado en tienda!
En la práctica
Las habitaciones están disponibles de esta forma hasta el 30 de junio.
Calcula unos 115 euros por una habitación para dos personas con desayuno incluido. Más información aquí.
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