Nueva fumata blanca del Banco Central Europeo (BCE). Tras una primera bajada de sus tipos de referencia el 6 de junio, la institución de Fráncfort ha vuelto a hacerlo este jueves 12 de septiembre, con una nueva rebaja del 0,25%. Para los particulares, se trata de una buena y mala noticia a la vez: por un lado, pueden esperar una bajada del coste de sus hipotecas en los próximos meses, por otro, también significa que algunas de sus inversiones serán menos rentables.
La política del BCE tiene un impacto directo en los rendimientos del ahorro, y en particular en los productos a corto plazo distribuidos por los actores bancarios, como las cuentas de ahorro y las cuentas a plazo. Entre los tres principales tipos de interés, el tipo de interés de depósito determina, por ejemplo, el tipo de interés al que el Banco Central remunera el capital que los bancos depositan en él. Así, cuando la remuneración de sus depósitos disminuye, estos lo trasladan lógicamente a los tipos que ellos mismos pueden ofrecer a sus clientes.
En previsión de la decisión de hoy, los bancos ya han bajado el tipo de interés de las cuentas de ahorro y de los depósitos a plazo fijo desde este verano: el pasado mes de junio, el mejor tipo anualizado del mercado (el Livret Distingo) podría subir hasta el 3%, cuando actualmente se encuentra en el 2,75%. Y en los próximos meses, este tipo máximo podría incluso bajar hasta el 2,50%, para igualar aproximadamente el tipo futuro del Livret A, previsto (…)
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