El partido del viernes entre River Plate y el club brasileño Grêmio fue interrumpido en el primer tiempo luego de que la jugadora de River Plate Candela Díaz fuera acusada de hacer comentarios racistas.
Según imágenes difundidas e informes de los medios locales, Díaz hizo gestos de mono hacia una recogepelotas.
En señal de protesta, los jugadores del Grêmio abandonaron el campo. El árbitro sancionó con tarjetas rojas a seis jugadores de River Plate tras un rifirrafe en el terreno de juego y finalmente dio por finalizado el partido por falta de jugadores necesarios para continuar el encuentro.
El marcador era 1-1, pero el árbitro le dio la victoria al Grêmio, que jugará la final del torneo el domingo.
Los organizadores del torneo dijeron en un comunicado de prensa el sábado que en futuras ediciones, cualquier equipo participante cuyos atletas o personal “realicen gestos racistas en el campo” será inmediatamente excluido.
Subrayaron: “La organización reafirma su postura antirracista e insiste en que nunca tolerará este tipo de incidentes”.
Grêmio expresó su apoyo a sus jugadores a través de la red social X, afirmando que presentarán una denuncia ante la policía.
“Lamentamos lo sucedido y condenamos cualquier acto discriminatorio”, dijo el equipo en su comunicado.
La entrenadora de la selección brasileña, Thaissan Passos, reveló que sus jugadores denunciaron que los jugadores de River Plate los llamaban “monos”.
“Incidentes como éste no pueden seguir ocurriendo. ¿Hasta cuándo vamos a fingir que el racismo no existe?”, dijo en una entrevista con el canal local SporTV.
Díaz no ha hecho comentarios públicos.
River Plate también condenó los gestos discriminatorios y afirmó a través de X que están “tomando las medidas disciplinarias correspondientes y seguirán trabajando para erradicar tales conductas”.
Related News :