Y todavía quedaban nueve. Más de 650.000 espectadores, lo que supone una cuota de mercado del 36%, vieron al recién llegado Aster Nzeyimana guiar a los candidatos de ‘Destino X’ a través de su primer desafío en Grecia.
Para Maxine, el viaje terminó abruptamente en Atenas, el primer lugar de salida. Su salida deja una profunda impresión en los demás candidatos. A medida que el grupo continúa su viaje, algunos candidatos comienzan a sospechar que pueden estar en un lugar muy diferente al que pensaban en un principio. Pero queda poco tiempo para recuperarse, ya que el juego continúa sin piedad. Mientras algunos se benefician de consejos cruciales y alianzas sólidas, otros quedan enredados en el laberinto de engaños. ¿Quién se mantiene alerta, quién comete errores y quién será el próximo en quedar fuera del juego?
Los candidatos comienzan esta semana en un idílico paisaje montañoso, pero la atmósfera cambia en una cueva misteriosa: en tres equipos tienen que sacrificar valiosos objetos personales para ganar una visión exclusiva de la zona VIP y la clasificación de salida. ¿Quién estaba cerca del lugar de salida y quién se arrastró por el ojo de la aguja? Pero eso no es todo: en un segundo altar se esconden pistas que pueden marcar la diferencia si se notan… Los sentidos también se ponen a prueba en un museo de historia natural y muchos consejos están disponibles. Los tres capitanes de cada equipo deben buscar con los ojos vendados ingredientes para una prueba de cocina, mientras sus compañeros los guían con sonidos de animales. Pero no todos juegan para el equipo: Karlien y Daisy envían deliberadamente a su capitán Ronald a un lugar que sólo ellos pueden ver. ¿Comparten esta información crucial o se la guardan para sí mismos?
La colaboración dentro del grupo también es buena. Mientras Bart y Quentin, así como Anke y Karlien, forjan vínculos, Yarno apuesta por su propio rumbo: “Quiero continuar con mis propios sentimientos sin estar atado a nadie más”. La colaboración puede ayudar, pero también puede ser peligrosa. Niels experimentó esto la semana pasada cuando compartió su información con demasiado entusiasmo con todo el grupo. Ahora está decidido a mantener sus cartas cerca de su pecho. ‘No voy a volver a cometer ese error. Cada uno puede elegir, pero ya no voy a compartir nada”, suena. ¿Podrá realmente mantener la boca cerrada esta semana o volverá a caer en la trampa?
Al igual que en el episodio anterior, los candidatos de esta semana reciben un rechazo adicional de un cómplice conocido. Esta vez es Ingeborg quien puede aumentar el caos. ¿Con qué sutileza llevará Ingeborg a cabo sus tortuosos planes? ¿Y quién caerá en su trampa con los ojos abiertos? Todo esto queda claro cuando el autobús se detiene en la segunda salida. El estrés aumenta cuando los candidatos tienen que colocar su X en el mapa de Europa. “Tu cabeza es una máquina de pinball”, dice Daisy. Y Alyssa también está preocupada: ‘Se han creado muchos equipos y la gente comparte información. Mucha gente estará en la misma región”, dijo. ¿Quién juega correctamente? ¿Quién está a kilómetros de distancia? ¿Y qué nuevos giros les esperan a los candidatos?
‘Destino