Familiares de rehenes israelíes retenidos por Hamás participaron en una reunión de la Internacional Socialista (IS) en Rabat, pidiendo la movilización internacional para la liberación de sus seres queridos. Este momento de intercambio sirvió como recordatorio de la magnitud del sufrimiento humano generado por el conflicto palestino-israelí para las poblaciones de ambos campos y la necesidad de implementar soluciones humanitarias urgentes.
La Internacional Socialista, una organización política internacional que reúne a los principales partidos socialistas, socialdemócratas y laboristas del mundo, así como a algunos partidos democráticos, se reunió en la capital marroquí para discutir las actuales crisis geopolíticas. Entre los temas discutidos, la situación en Israel y Palestina ocupó un lugar central, en particular las dramáticas consecuencias del conflicto para las poblaciones civiles.
Llamados a la solidaridad internacional
Las familias de los rehenes israelíes hablaron de su desesperación y expectativas por la percibida inacción de la comunidad internacional. Pidieron que se intensificaran los esfuerzos para permitir la liberación de sus seres queridos, retenidos durante meses en condiciones que califican de inaceptables. “Hacemos un llamado a todas las naciones aquí representadas a no permanecer indiferentes. La liberación de estos prisioneros civiles es una cuestión de humanidad, un gesto que podría traer un poco de esperanza en un contexto donde las familias viven en permanente angustia.expresaron varios oradores citados por diferentes medios.
Estas familias también insistieron en la importancia de no disociar la emergencia humanitaria de la necesidad de una solución política duradera. Recordaron que, para muchos de ellos, la Navidad o Hanukkah no podrán celebrarse mientras sus seres queridos permanezcan privados de su libertad.
Conciencia internacional
Los representantes de los partidos miembros de la Internacional Socialista escucharon atentamente estos testimonios, algunos subrayando la necesidad de incrementar los esfuerzos diplomáticos para un intercambio de prisioneros. Esto último se considera un paso clave para aliviar las tensiones en la región y allanar el camino para una tregua duradera.
Voces también insistieron en el papel que pueden jugar actores influyentes dentro de la organización, particularmente líderes europeos y latinoamericanos, en el impulso de las negociaciones entre las partes. Se ha hecho un llamamiento específico a la atención de los Estados miembros de la ONU para garantizar que la cuestión de los rehenes ocupe un lugar destacado en la agenda internacional.
Más allá de las discusiones políticas, este momento sirvió para recordar que, detrás de las cifras y los informes, hay vidas humanas en juego. “El dolor de las familias es insoportable. Cada día que pasan lejos de sus seres queridos es demasiado. Debemos actuar ahora, no mañana”declaró un participante al final de la reunión.