por Hyonhee Shin
El ejército de Corea del Sur dijo el lunes que había detectado señales de que Corea del Norte se estaba preparando para enviar más tropas y armas, incluidos drones suicidas, para apoyar a Rusia en el conflicto con Ucrania.
Según el Estado Mayor Conjunto (JCS) de Seúl, Corea del Norte ya ha suministrado a Rusia lanzadores múltiples de cohetes de 240 mm y obuses autopropulsados de 170 mm. Pyongyang también está en camino de producir más drones suicidas para Rusia desde que el líder norcoreano Kim Jong-un supervisó una prueba de los drones el mes pasado, añadió el JCS.
“Los drones suicidas son una de las tareas en las que se ha centrado Kim Jong Un”, dijo un funcionario del Estado Mayor Conjunto.
Estos drones han sido ampliamente utilizados en la guerra en Ucrania, y Kim Jong-un ha ordenado la producción en masa de estas armas, así como una actualización de la doctrina militar del país, a la luz de la intensificación de la competencia global, informaron los medios estatales.
Según las autoridades surcoreanas, estadounidenses y ucranianas, unos 12.000 soldados norcoreanos están desplegados en Rusia. El JCS dijo que al menos 1.100 de ellos murieron o resultaron heridos, una cifra que corrobora un informe publicado la semana pasada por la agencia de inteligencia surcoreana, que cifró alrededor de 100 muertos y un millar de heridos en la región rusa de Kursk.
Fortalecer los lazos militares entre Corea del Norte y Rusia podría permitir a Pyongyang modernizar sus fuerzas convencionales y ganar experiencia en combate, creando una nueva amenaza para Corea del Sur, dijo el funcionario del JCS.
A lo largo de la fuertemente fortificada frontera coreana, Corea del Norte ha instalado barreras y alambre de púas en las últimas semanas y ha desplegado hasta 10.000 soldados para cambiar la situación en la zona, detalló el JCS.
El JCS publicó fotografías que muestran a un grupo de soldados norcoreanos probando la cerca de alambre electrificado utilizando una cabra.
También es posible que Pyongyang realice una prueba de misil hipersónico de alcance intermedio hacia finales de año, antes de la toma de posesión del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, añadió el JCS.
“Con el apoyo de Rusia, Corea del Norte probablemente intentará llevar a cabo varias provocaciones estratégicas el próximo año, como el lanzamiento de misiles balísticos intercontinentales y una prueba nuclear, para fortalecer su capacidad de negociación con Estados Unidos”, afirmó el funcionario del JCS.
(Reportaje de Hyonhee Shin, versión francesa de Claude Chendjou, editado por Kate Entringer)
