El martes 24 de diciembre, con motivo de Nochebuena, los Restos du coeur du Puy-de-Dôme lanzaron una convocatoria para una recogida de postres para las personas sin hogar. Un llamado que fue escuchado por cocineros de gran corazón. Las personas sin hogar pudieron disfrutar de un buen regalo en Nochebuena.
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En Cournon-d’Auvergne, cerca de Clermont-Ferrand, Marcel es el guardián de un tesoro: pasteles caseros recogidos para distribuirlos entre las personas sin hogar. Cécile es voluntaria en Restos du Cœur. Ella decidió participar. Ella explica: “Cambia la vida cotidiana. La gente ve que pensaron en ellos. Saben que está hecho para ellos.”. Es la primera vez que la asociación pone en marcha esta operación de postres. Hervé respondió a la llamada con una tarta de chocolate. Precisa: “Son 20 minutos y hace feliz a la gente, igual que a nosotros nos hace felices cuando alguien nos hace un pastel.”.
La cosecha es buena. Este año la comida navideña la preparó una empresa externa. Faltaba dulzura para acompañar lo ordinario. Danielle Cortinovis, voluntaria y responsable de comunicación, subraya: “Reaccionamos diciendo que no podíamos dejarles con una comida normal y corriente, sin postre. Lanzamos un llamamiento a la buena voluntad de los cocineros de gran corazón que puedan hacer algo”.
Desafortunadamente, el autobús del corazón no arrancó ese día. Ni siquiera Papá Noel hará milagros. Manon Delaval, voluntaria y responsable de las actividades de las personas de la calle, especifica: “El autobús está envejeciendo. Data del año 1995. A menudo tenemos pequeños problemas mecánicos. Esta tarde por un problema de batería no arranca. No tenemos la posibilidad de iniciarlo por lo que será el sistema D.”.
El sistema D es una furgoneta. La carga se puede realizar para permitir que las comidas lleguen de manera segura y que los beneficiarios disfruten de una cena caliente. “El ambiente y la comida son cálidos. Es fraternal, creo”, indica un beneficiario de Restos du Cœur. Las famosas delicias fueron muy populares. Un beneficiario concluye: “Es conmovedor saber que la gente piensa en nosotros. no estamos solos”. Se distribuyeron casi 60 comidas para Navidad. Incluso quedaron postres para calentar el largo viaje de los beneficiarios.
Comentarios recogidos por Romy Ho-A-Chuck / France 3 Auvergne
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