El 20 de noviembre de 2024, la policía municipal de Drancy (Seine-Saint-Denis, 93) intervino para ayudar a una perra y a sus cachorros que vivían en condiciones deplorables.
En cualquier caso, los perros fueron fruto del tráfico ilegal de cría, pero afortunadamente pudieron ser cuidados antes de ser vendidos gracias a la determinación de la policía y los investigadores de protección animal que fueron llamados al lugar.
Están encerrados en un trastero al aire libre
Al fondo de un patio lúgubre y lleno de cachivaches, los pobres animales estaban almacenados en una especie de sótano al aire libre, sin la más mínima luz natural.
Oculta en una caseta improvisada y camuflada con una cortina, la pobre perrita se refugiaba con sus adorables bebés que estaban teniendo un mal comienzo en sus vidas. In situ, el investigador Abdel Boudjemaa captó las primeras imágenes de esta alarmante situación. Muy tranquila, la perra parece resignada a su triste destino.
Afortunadamente, gracias a la ayuda de la policía de Drancy, la asociación Espoir PA, la Animal Assistance Foundation, la asociación Avenir Animal y varios voluntarios, los animales pudieron ser retirados inmediatamente.
Colocadas en una familia de acogida, esta madre y sus cachorros finalmente podrán esperar un futuro brillante, fuera de las manos de personas irresponsables.
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