Nuevo aumento de estafas que involucran a falsos policías y falsos banqueros. Desde hace varias semanas, las personas mayores vuelven a ser el principal objetivo de los estafadores. Se hacen pasar por agentes del orden o banqueros. Después de actuar por teléfono, los delincuentes acudieron a las residencias de ancianos, informó la policía cantonal en un comunicado de prensa el jueves. Jugando con el efecto de sorpresa y miedo, alegan un problema con su tarjeta bancaria, así como retiradas fraudulentas de sus cuentas.
“Con mucha habilidad”, los estafadores obtienen las tarjetas bancarias y los códigos PIN de sus víctimas y las convencen para que les confíen el dinero que tienen en efectivo en casa. A esto le siguen retiros de cajeros automáticos y cuentas bancarias vacías. En algunos casos, los delincuentes logran convencer a sus víctimas de que retiren ellos mismos el dinero. También llaman a un taxi para garantizar el transporte de personas que suelen ser muy mayores. E incluso pueden regresar a la casa de la víctima al día siguiente, haciéndose pasar por un verdadero policía.
Entre sus consejos, la policía recomienda no proporcionar nunca información personal o bancaria a nadie por teléfono o en casa. Se ruega a los familiares o personas cercanas a personas mayores que describan tal situación que avisen a la policía al 117.
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