un homenaje solemne a los implicados

El prefecto de Ariège, Simon Bertoux, presidió recientemente una ceremonia oficial en homenaje a los abanderados del departamento. Junto a representantes de las autoridades civiles y militares, quiso saludar el compromiso de estos hombres y mujeres que, con su presencia en las conmemoraciones y eventos patrióticos, encarnan la memoria y los valores de la República. La ceremonia estuvo marcada en particular por la presentación de la insignia del abanderado, un fuerte símbolo que reconoce la implicación y la dedicación de quienes velan por el respeto de las tradiciones conmemorativas.

Esta jornada solemne comenzó con una sesión de formación impartida a los abanderados por el servicio departamental de la Oficina Nacional de Veteranos y Víctimas de la Guerra (ONaCVG) de Ariège, en colaboración con varias asociaciones locales. El objetivo de esta formación fue transmitir los códigos y responsabilidades propias de esta función, así como fortalecer el espíritu de cohesión entre los participantes.

Para esta ocasión también estuvieron presentes una treintena de jóvenes de las Clases de Defensa de los institutos de Lavelanet y Pamiers, así como voluntarios del Servicio Nacional Universal (SNU). Su participación demuestra un creciente interés entre las generaciones más jóvenes por el deber de la memoria y el simbolismo del abanderado. Involucrados en esta enriquecedora experiencia, los estudiantes pudieron tomar conciencia de la importancia de esta misión y del papel central que juega la memoria colectiva en la construcción de una sociedad unida en torno a valores comunes.

Simon Bertoux subrayó en su discurso lo esencial que es “transmitir la llama de la memoria a las generaciones futuras”, recordando así la importancia de los abanderados en el vínculo intergeneracional. Esta ceremonia, emotiva y llena de respeto, concluyó con debates entre los participantes, todos unidos por el deseo de perpetuar el deber de la memoria.