Abróchense los cinturones, porque en 2025 los radares de carretera darán un giro tecnológico que sorprenderá a más de uno. Atrás quedaron los días en los que simplemente medían nuestra velocidad a escondidas.
A partir de ahora, estos dispositivos podrán pillarnos con las manos en la masa por tres nuevos delitos, hasta ahora reservados a los ojos expertos de gendarmes y policías.
¿El objetivo? ¡Hagamos de nuestras carreteras un lugar más seguro, o al menos un poco menos impredecible!
leer
Dacia desafía al Citroën C4 con el lanzamiento de un nuevo compacto competitivo
No olvides abrocharte el cinturón de seguridad.
Entonces, ¿cuáles son los nuevos crímenes que nuestros queridos radares podrán descubrir? Te lo explicamos todo, sin reservas. El año que viene, una actualización digna de los mejores dispositivos de ciencia ficción transformará a estos centinelas silenciosos en implacables detectores de malas conductas.
En primer lugar, estará el incumplimiento de las distancias de seguridad, no más meter el coche delante como si de una cita se tratase. Entonces, el famoso cinturón, a menudo olvidado en los viajes rápidos, ya no escapará al ojo láser de los radares. Por último, utilizar el teléfono mientras se conduce, este compañero de viaje ineludible para algunos, puede generarle una multa considerable.
Sanciones incurridas
Además, hablemos de sanciones. Si te pilla uno de estos radares, prepárate para calentar la tarjeta de crédito. Por cada infracción se pierden 135 euros y desaparecen tres puntos de la licencia.
Baste decir que las conversaciones telefónicas en modo piloto automático corren el riesgo de salirle caras, al igual que los mensajes de texto escritos mientras se detiene en un semáforo en rojo. Por supuesto, queda una pregunta delicada: en caso de error, ¿podremos desafiar estos radares? Yves Carra, portavoz del Mobilité Club France, advirtió que se necesitarán pruebas concretas para evitar injusticias.
leer
Los conductores mayores se enfrentan a nuevos retos para mantener su permiso en España
Imagínese, un radar confunde un paquete de cigarrillos con un teléfono y le imponen una multa injusta. “La foto tendrá que ser muy precisa”, alega. En caso de error, la posibilidad de impugnación debe ser sencilla y accesible. Los conductores no quedarán indefensos frente a esta tecnología.
Las asociaciones acogen favorablemente este refuerzo de la seguridad, aunque con algunas reservas. Para Pierre Lagache, vicepresidente de la Liga contra la violencia vial, estos avances son alentadores, pero no suficientes. “El control de las sanciones es importante, pero para lograr un cambio real también necesitamos campañas de concientización. » En otras palabras, monitorear es bueno, pero hacer que la gente entienda es mejor.
Related News :