Durante una sesión de la IV Comisión de la Asamblea General de la ONU, el embajador de Marruecos ante las Naciones Unidas, Omar Hilale, criticó al embajador de Argelia, Amar Benjama, por su reiterada fijación en la cuestión del Sáhara marroquí. Hilale calificó esta obsesión de “patología esquizofrénica”, acusando a Argelia de ser prisionera de una lógica de conflicto permanente.
En respuesta a los ataques de su homólogo argelino, Hilale denunció el doble discurso de Argelia: “Por un lado, se declara neutral, afirmando que no es una parte interesada, pero por otro, da lecciones y desafía a nuestra comisión sin jamás se ha dirigido al Consejo de Seguridad”, declaró el embajador marroquí. Señaló la actitud “extraña” de Argel, que parece evitar los debates en el Consejo de Seguridad, que sin embargo es responsable de las decisiones sobre la cuestión del Sáhara marroquí.
“El Consejo de Seguridad es el organismo que sostiene el derecho internacional y negocia la solución política. Pero Argelia prefiere ignorar este organismo, como ignora las intervenciones que han resonado en nuestra Comisión durante los últimos diez días”, indicó, lamentando que al embajador argelino le guste “el espectáculo”.
El embajador marroquí no dudó en desmontar el argumento argelino en torno a la existencia del llamado “pueblo saharaui”. “¿Qué gente? No existe ningún pueblo saharaui. Hay poblaciones saharauis, parte de las cuales están encerradas en los campos de Tinduf, controlados por las milicias del +polisario+ y el ejército argelino”, ironiza.
Hilale luego desafió a su homólogo argelino a aclarar el término “pueblo”, una definición que ni siquiera la Comisión de Derechos Humanos de la Unión Africana ha logrado determinar con claridad.
En cuanto a la cuestión de la autodeterminación planteada por Benjama, el diplomático marroquí replicó: “El embajador argelino está tan obsesionado con Marruecos que ignora la iniciativa marroquí de autonomía, que prevé una consulta popular al final de las negociaciones”, añadiendo que “ Esta iniciativa, apoyada por el Consejo de Seguridad, es para Marruecos el único camino hacia una solución política consensuada, duradera, pragmática, basada en el compromiso, como recomienda este Consejo”.
Al respecto, afirmó que “solo gracias a las mesas redondas y a la rendición de cuentas de los cuatro partidos esta región podrá encontrar la paz y la estabilidad. Mientras tanto, Marruecos continúa resueltamente su camino de desarrollo de la región del Sáhara marroquí y deja que Argelia ladre”, concluyó Hilale.
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