En un contexto marcado por las inundaciones en la cuenca del río Senegal, Abdoulaye Dia, director general de SEMAF (Société d’Exploitation de Manantali et du Félou), quiso aportar detalles sobre el origen de estas inundaciones. Según él, la idea generalizada de que las descargas de agua de la presa de Manantali son responsables del aumento del nivel del agua en el río Senegal es “exagerada”.
“En caso de inundaciones excepcionales, como las observadas este año, las liberaciones son necesarias por razones de seguridad”
Dia insistió en que las actuales inundaciones no se deben sólo a las liberaciones de la presa de Manantali, sino a un conjunto de factores hidrológicos en toda la cuenca del río Senegal.
La presa de Manantali, situada en el río Bafing en Malí, desempeña un papel importante en la gestión del agua, pero no es el único factor que influye en el caudal del río Senegal. En una nota enviada a PressAfrik, recordó que Manantali es una presa plurianual, con una capacidad de almacenamiento de 11 mil millones de metros cúbicos de agua. “El agua que llega se almacena así durante varios años porque se trata de una presa plurianual”, explicó. Según él, “esta agua se utiliza principalmente para la producción de electricidad, que se distribuye a los tres países miembros de la Organización para el Desarrollo del Río Senegal (OMVS)”.
Sin embargo, en caso de inundaciones excepcionales, como las observadas este año, las liberaciones son necesarias por razones de seguridad. “Estas liberaciones se realizan a través de válvulas colocadas en la estructura; es por razones de seguridad, tanto de la presa como de las poblaciones aguas abajo”, subrayó. Sin embargo, estas liberaciones sólo controlan “alrededor del 40% de las aguas que abastecen la cuenca del río Senegal. »
El director general de SEMAF también explicó que el río Senegal se forma por la confluencia de los ríos Bafing y Bakoye en Bafoulabe, Mali, y al que se unen otros afluentes, como el Falémé. “El caudal total observado en la cuenca del río Senegal es, por tanto, la suma del caudal de los ríos Bafing, Bakoye, Falémé, así como el agua de escorrentía procedente de las lluvias en Mauritania, Malí y Senegal”, explicó.
Recordó que están en marcha otros proyectos de presas, como la de Gourbassy, para regular mejor el río, además de la presa de Diama, situada cerca de Saint-Louis. Sin embargo, las inundaciones actuales se consideran excepcionales, comparables a las de 1961. “Hemos observado inundaciones que no se observaban desde 1961. Se trata, por tanto, de inundaciones excepcionales”, afirmó, añadiendo que “desde ayer por la tarde se ha observado un ligero descenso del nivel del agua”. . »
Abdoulaye Dia advirtió también que “la situación sigue estrechamente ligada a las precipitaciones, especialmente en Guinea, de donde nacen muchos afluentes de la cuenca del río Senegal. » Aseguró que la OMVS y el Ministerio senegalés de Hidráulica, en coordinación con las unidades de crisis de los Estados afectados, siguen de cerca la evolución de la situación.
Finalmente, destacó la importancia de la seguridad de la propia presa. “Una estructura de este tipo, que era muy costosa, si cediera por no realizar las liberaciones cuando era necesario, podría provocar una inundación que podría llegar muy lejos tierra adentro”, advirtió. No dejó de indicar que “todas las medidas de seguridad están implementadas y que los dispositivos de seguridad de la presa, en particular las válvulas, funcionan correctamente. »
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