Interrogado en sesión plenaria del parlamento valón, este último indicó que había “tomado nota” de este informe que destaca “graves deficiencias”, incluidos “malos tratos”, desde 2015 en sesenta establecimientos de acogida de franceses con discapacidad en Bélgica.
“La Agencia Valona para una Vida de Calidad (Aviq) estaba al tanto de ello, ya que era ella quien transmitía la información al Tribunal de Cuentas y quien investigaba los expedientes en los que se señalaban problemas”, explicó Yves Coppieters.
Según este último, unos 7.000 adultos y 1.200 niños franceses reciben asistencia integral en 156 estructuras valonas. De este número, 113 fueron inspeccionadas por Aviq en 2023.
“El problema es real, pero la gran mayoría de los servicios han puesto en marcha planes de acción y reformas. Cinco servicios han sido cerrados por Aviq al retirarles su autorización y 13 servicios en los que existen dificultades siguen bajo supervisión”, añadió el ministro, que se reunirá con su homólogo francés para tratar el tema.
“Estas estructuras están infrafinanciadas porque los presupuestos franceses son muy inferiores al coste real de la atención. Hay que hacer algo en términos de supervisión de estos establecimientos, pero también en términos políticos para restablecer el equilibrio financiero”, concluyó.
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