Ha llegado el momento del debate en el Parlamento. En efecto, fue este martes 7 de enero que el Código de Familia llegó a los diputados, en particular a la Comisión de Justicia y Derechos Humanos. Los ministros de Justicia, Ouahbi, y el de Habous, Ahmed Touafiq, están invitados a enfrentarse a los representantes electos de la Primera Cámara para presentar y exponer las novedades de la reforma de este texto que sigue generando mucha tinta.
Dicho esto, y en un contexto en el que los debates sociales en torno a este texto siguen siendo muy animados, esta primera reunión de este martes en el Parlamento marca el inicio de un complejo proceso legislativo en el que los diputados están llamados a examinar atentamente las enmiendas, bajo la atenta mirada de los marroquíes.
Mientras tanto, continúan los debates y los intercambios a través de los distintos canales de comunicación. Los diferentes oradores de diferentes orígenes abogan por una Moudawana equilibrada, justa y equitativa. ¡Y otros van aún más lejos! Algunos incluso han pedido un referéndum popular. El PJD, por su parte, sigue convocando una manifestación popular contra los textos del dúo Ouahbi-Tawfiq.
Para Benkirane y sus amigos, una propuesta como la exclusión del domicilio conyugal de la herencia no pasa por el interesado, argumentando que los herederos se verán privados de su legítimo derecho ya que “son derechos establecidos por Alá” y que “nosotros No debería haberlo tocado”.
El PJD, a través de su SG, ve en esta propuesta una amenaza directa al derecho sucesorio tal como lo define el Islam y pidió aclaraciones al organismo responsable de la revisión del Código de Familia, recordando de paso que esta propuesta ha sido rechazada por los estudiosos. quienes lo consideran contrario a textos religiosos bien establecidos.
Además, el SG del PJD considera que la propuesta de considerar el papel del ama de casa como trabajo es incomprensible y que si este proyecto se adoptara en Marruecos, convertiría al país en un caso único en el mundo, lo que, según él, Provoca un desinterés de los jóvenes por el matrimonio, una situación “muy preocupante”. En resumen, según Benkirane, las novedades introducidas en la Moudawana no dejarán de destruir y desestabilizar los fundamentos jurídicos y divinos de la familia marroquí.
Recordamos que, en su presentación, Ahmed Toufiq, Ministro de Habous y de Asuntos Islámicos, dejó claro al Soberano que el dictamen del Consejo Superior de los Ulemas estaba de acuerdo con la mayoría de las 17 cuestiones sometidas a dictamen jurídico en el marco de la revisión del Código de Familia: “De conformidad con la decisión pertinente de Su Majestad el Rey, Amir Al-Mouminine, de presentar amablemente 17 cuestiones para opinión jurídica, la opinión del Consejo Superior de Ulemas ha sido cumplimiento de la mayoría de estas cuestiones”, dijo, al tiempo que precisó las posibles modalidades para el cumplimiento por parte de otros de las reglas de la Sharia.
Y además, tres de ellos se refieren a textos formales que no autorizan el Ijtihad en su materia, en este caso los relativos al uso de conocimientos genéticos para establecer la filiación paterna, a la derogación del gobierno de Taâsib y a la sucesión entre un musulmán y un no musulmán.
Y precisar que el Consejo ha dado su aprobación a las propuestas de la Autoridad relativas a la posibilidad de celebrar el certificado de matrimonio para los marroquíes residentes en el extranjero sin la presencia de dos testigos musulmanes si esto resulta imposible, la concesión de la tutela legal de los hijos a la madre responsable de custodia y consideración del trabajo de la esposa dentro del hogar como contribución al desarrollo de los bienes adquiridos durante la relación matrimonial.
Es también, continuó, la obligación de Nafaqa en beneficio de la esposa a partir del establecimiento del certificado de matrimonio, la exclusión del hogar conyugal de la herencia, la priorización de las deudas de los dos cónyuges resultantes de la comunidad de bienes en relación con otras deudas en virtud de su asociación y el mantenimiento de la custodia de la madre divorciada sobre sus hijos, incluso en caso de nuevo matrimonio.
Por su parte, el Ministro de Justicia, Abdellatif Ouahbi, indicó que las propuestas resultantes de amplias consultas se refieren a las distintas cuestiones enmarcadas por el Código de la Familia y tienen como objetivo corregir determinadas disfunciones jurídicas y judiciales registradas, para superar la pesadez y la lentitud de los procesos judiciales. procedimientos, garantizar una mayor intervención del fiscal y hacer frente a determinados fenómenos sociales relacionados con las cuestiones del matrimonio de menores, la poligamia, la custodia de los hijos, la Nafaqa, la tutela legal, del hogar conyugal, así como los problemas resultantes de la ruptura de la relación matrimonial que amenacen el interés superior de los hijos.
¡Esto significa que en el Parlamento la batalla por una Moudawana moderna o una Moudawana conservadora no será relevante!
HZ
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