Es un hecho. Pasamos alrededor de 4,5 horas al día frente a las pantallas, en detrimento de la lectura en particular. Una observación aún más importante entre los jóvenes. Según una encuesta realizada en 2024 por el Centro Nacional del Libro, los jóvenes franceses pasan 10 veces más tiempo frente a las pantallas que leyendo.
Sin embargo, las pantallas y las herramientas digitales no son necesariamente enemigas del trabajo en papel. Incluso pueden ser aliados para dar o recuperar el gusto por la lectura.
Fomentando la lectura en las redes sociales
Contrariamente a lo que parece, las redes sociales pueden ser una ventaja para los libros, en particular gracias al movimiento “BookTok”. En TikTok, YouTube o Instagram, los influencers comparten sus lecturas favoritas y actúan como críticos literarios. “Son locomotoras y tratan de demostrar que la lectura puede ser atractiva, estimulante. Lo que veo a través de ellos es entusiasmo, el deseo de compartir su emoción ante una lectura. Si te dan ganas de leer, ¡genial! », exclama Sarah Sauquet, profesora de literatura y autora. A nivel académico, una reseña literaria en vídeo es incluso “un ejercicio educativo interesante”, añade, que puede ser una manera de estimular a los jóvenes.
Aplicaciones
Otra herramienta divertida y accesible para todos: las aplicaciones móviles. Sarah Sauquet es cocreadora de ocho aplicaciones literarias, incluidas Un Texte un jour y Un Texte une femme. “Partí del principio de que la capacidad de atención es cada vez más difícil de conseguir y que el tiempo de lectura es precioso”, explica.
Para recuperar el gusto por los grandes clásicos de la literatura, estas aplicaciones ofrecen la oportunidad de descubrir cada día de forma eficaz y rápida un texto de estos clásicos, contextualizado y acompañado de una herramienta educativa con notas. “Una herramienta que puede utilizarse académicamente para revisar y analizar extractos de comedia de Molière, por ejemplo”, explica el profesor. Una aplicación útil también para adultos, para hacer o darle ganas de leer cierta literatura imprescindible.
audiolibros
¿No puedes sumergirte en la lectura de un libro? ¡Escúchalo! La lectura también se puede hacer con los oídos. Esta otra forma de leer te permite descubrir una obra caminando, en transporte público, en el coche, etc. Y puede que te apetezca dedicar un rato a la lectura de clásicos.
Vinculando lectura y pasión
“Hay lectura literaria pero también lectura documental”, señala Sarah Sauquet, que aconseja a los padres integrar la lectura a través de las pasiones del niño: los dinosaurios, la astronomía, el fútbol, la danza. ¡Un consejo que también funciona muy bien para los adultos!
Adaptaciones en diferentes formas.
Las obras adaptadas al cine son una excelente manera de interesar a futuros lectores potenciales. “Lo vimos con El conde de Montecristo. El libro de Alexandre Dumas obtuvo un nuevo éxito en las librerías tras el estreno de la película. Por supuesto, si deciden leer el libro después de ver la película, ya sabrán el final, pero el libro siempre contiene más detalles, a veces es un poco diferente, ya que una adaptación cinematográfica requiere decisiones, en particular limitar la duración”. señala Sarah Sauquet.
La lectura de la versión impresa no necesariamente toma la forma de novelas. El manga y los cómics, considerados más fáciles de leer, atraen especialmente a los más jóvenes. Hoy en día, muchos artistas han dado vida y color a los personajes de Molière, Camus o Victor Hugo, que han sido adaptados al cómic. El conde de Montecristo ¡Incluso se adaptó a un manga! Estos géneros literarios son una buena forma de integrar la lectura para aquellos que son más cautelosos. “Lo más importante es la curiosidad”, recuerda el autor.
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