Una “joya olvidada”, la Abadía de Roseland será rehabilitada como instituto climático tras su compra por parte del departamento al ayuntamiento

Una “joya olvidada”, la Abadía de Roseland será rehabilitada como instituto climático tras su compra por parte del departamento al ayuntamiento
Una “joya olvidada”, la Abadía de Roseland será rehabilitada como instituto climático tras su compra por parte del departamento al ayuntamiento
-

Se prevén importantes obras en este lugar excepcional del patrimonio de Niza, clasificado como monumento histórico pero abandonado en los últimos años.

La ciudad de Niza acabó vendiendo la Abadía de Roseland, un lugar patrimonial excepcional erigido en 1763 pero abandonado en los últimos años, al departamento de Alpes Marítimos por cuatro millones de euros. La comunidad departamental anunció que rehabilitaría el local para convertirlo en un “instituto para el clima”: criticó al municipio por separarse de esta abadía por falta de dinero para mantenerla, el presidente del consejo departamental Charles-Ange Ginésy y el El diputado Éric Ciotti, que participa en esta asamblea local, destaca las dificultades financieras de la ciudad dirigida por Christian Estrosi.

Esta venta, en un contexto de rivalidad entre ambas comunidades, fue aprobada el miércoles por el ayuntamiento, mientras que un proyecto inmobiliario de pisos de lujo acabó siendo descartado. Los habitantes del distrito de Fabron Hill se opusieron a tal rehabilitación de la abadía y sus jardines, que se extienden sobre 8.200 metros cuadrados y ofrecen una ventana a la Bahía de los Ángeles. El complejo fue clasificado como monumento histórico en 1966 y el ayuntamiento de Niza era propietario desde 1971.

“Trabajo pesado”

El municipio insistió “el duro trabajo de rehabilitación y mejora”que podría ascender a cerca de 20 millones de euros. Lo cual no parece ser un problema para el departamento de Alpes Marítimos, recordó su presidente en una carta del pasado mes de febrero que asume “una política de restauración y salvaguardia del patrimonio histórico y religioso”.

“La ubicación privilegiada de la abadía con vistas al Mediterráneo ofrece un marco ideal para abordar cuestiones relacionadas con el calentamiento global”también había adelantado a Charles-Ange Ginésy en junio de 2023, al posicionarse para adquirir esta propiedad que describe como “joya”. En los planos presentados se prevería un espacio expositivo, un “campus” para la investigación científica y un lugar reservado para la historia del sitio. El edificio principal tiene una superficie útil de 700 metros cuadrados, distribuidos en tres plantas, dependencias anexas, claustro y capilla situada en la terraza superior.

-

PREV Rumbo a espectáculos durante las vacaciones de Navidad: algunas ideas de actividades para mantener ocupados a grandes y pequeños en Chartres
NEXT Senegal y Liberia se neutralizan en la fase de clasificación