¿Una capital a imagen de su país? Este martes, el Consejo de París debe adoptar el presupuesto de la ciudad para 2025, en un contexto de incertidumbre sobre el proyecto de ley de finanzas y polémica sobre la deuda de la capital, que cristaliza las críticas de la oposición al mandato de la alcaldesa Anne Hidalgo.
Este presupuesto, el último mandato completo del alcalde socialista, al frente de París desde 2014, prevé 11.300 millones de euros en gastos, de los cuales 1.700 millones en inversiones, una ligera disminución con respecto a 2024.
¿Qué presupuesto en 2025?
La deuda asciende a 9.300 millones de euros a finales de 2025, y se acercará a los 10.000 millones de euros en 2026, lo que supondrá más del doble en diez años el importe de la deuda de la comunidad, tanto a nivel municipal como departamental.
Un presupuesto “dinámico” que permitirá “actuar con ambición ante la emergencia climática” y “apoyar a las clases medias y a los más vulnerables” a través, en particular, de la producción de viviendas sociales y “asequibles”, afirmó Anne Hidalgo ante el Consejo de París.
Sin embargo, su ejecución exige “cautela” en un período de “gran incertidumbre”, según el concejal, a falta de un proyecto de ley de finanzas para 2025 tras la censura del gobierno de Michel Barnier, que acaba de suceder a François Bayrou.
La cuestión de la deuda de la ciudad
El ejecutivo municipal recordó que el tardío proyecto de ley de finanzas pretendía “tomar” 5.000 millones de euros de las autoridades locales, lo que, según sus cálculos, habría costado unos 320 euros por familia parisina.
La presentación del presupuesto reavivó la polémica recurrente sobre la deuda de París, cuyo aumento está relacionado con la oposición a la “mala gestión” y cuyo nivel socava las capacidades de inversión de la ciudad.
“En 2025, las cargas de deuda alcanzarán la cifra récord de 225 millones de euros. Esto es la mitad de lo que se estima sería necesario para adaptar la ciudad al cambio climático”, lamentó Maud Gatel, presidenta del grupo Modem, criticando “un sistema que está perdiendo fuerza”.
La oposición se está divirtiendo
“El margen de maniobra financiero es demasiado reducido” y corre el riesgo de “comprometer” la aplicación del plan climático 2024-2030, añade el alcalde de LR del distrito 17, Geoffroy Boulard (grupo Union Capitale).
El primer grupo de oposición a Anne Hidalgo presentó una enmienda para reducir el impuesto sobre la propiedad -que aumentó un 52% en 2023- en 500 millones de euros para “devolver 250 euros por parisino”.
“Trayectoria insostenible”
“No habéis ahorrado nada, contrariamente a las promesas hechas en 2022 de un plan de 250 millones de ahorros”, criticó Rachida Dati, copresidenta del grupo Changer Paris (LR).
La ministra dimisionaria de Cultura y candidata a las elecciones municipales de 2026 criticó a su rival por “dejar un legado” de una “deuda exponencial” y una “trayectoria presupuestaria insostenible” que “prepara a los parisinos para un nuevo aumento de impuestos”.
El segundo grupo de la oposición presentó un “contrapresupuesto” que permitiría, según él, ahorrar 300 millones de euros al año, en particular frenando las apropiaciones preventivas para la construcción de viviendas sociales y reduciendo los costes de personal del Ayuntamiento (53.000 agentes).
“Reduccionista” para juzgar el balance de Hidalgo “con el único criterio de la deuda”
Para Pierre Madec, economista del Observatorio francés de las condiciones económicas (OFCE), sería “reductivo” juzgar el desempeño de la alcaldesa saliente “sólo basándose en la deuda contraída, pero a la luz de lo que ha servido para financiar, en la transición energética, la vivienda social, la calidad de vida de los residentes”.
En la década de 2010, París se vio “estrangulada por el auge de las tasas de compensación entre comunidades”, que desempeñaron un papel importante en el aumento de la deuda, añade Christian Escallier, de la empresa Michel Klopfer, especializada en finanzas locales.
“Ciertamente no ajustó sus inversiones en consecuencia, pero sí el contexto olímpico. Su principal error fue no aumentar los impuestos antes”, afirmó a la AFP este experto, según el cual “los contribuyentes parisinos siguen pagando uno de los impuestos sobre la propiedad más moderados de las grandes ciudades de Francia”.