Frente a los desafíos socioeconómicos actuales, la Economía Social y Solidaria (EES) parece ser una respuesta innovadora y responsable. Fundada sobre valores de solidaridad, gobernanza compartida y utilidad social, reúne diversas estructuras: asociaciones, mutualidades, cooperativas o empresas sociales. Este modelo, consagrado por ley desde 2014, se distingue por su búsqueda de un impacto colectivo, poniendo a los seres humanos y al medio ambiente en el centro de las preocupaciones.
En las Landas, la ESS no se limita a una utopía económica. Constituye un verdadero motor de desarrollo local, creando empleo y promoviendo la innovación social, respondiendo al mismo tiempo a las necesidades específicas de los residentes. Este martes 12 de noviembre, en Mont-de-Marsan, el Departamento reafirmó su compromiso con este sector al desvelar su nueva hoja de ruta 2024-2027.
Las Landas, terreno fértil para la ESS
Con 11.700 puestos de trabajo repartidos en 7.000 estructuras, la ESS de las Landas supera la media nacional en términos de desarrollo. Durante la presentación, Xavier Fortinon, presidente del Consejo Departamental, recordó la importancia de seguir apoyando a este sector en un contexto económico incierto. Las iniciativas locales demuestran el impacto concreto de la ESS en el territorio.
Así, L’Arbre à Pain, un taller de integración con sede en Tartas, ilustra perfectamente este modelo. Al ofrecer actividades variadas, como la horticultura o el mantenimiento de espacios verdes, esta estructura permite encontrar empleo a 90 personas cada año. “ Nuestro primer impacto es económico, pero también profundamente social. », explica su directora, Corinne Mulquin, quien también destaca el papel clave de los mercados reservados en la financiación del taller.
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