Facilidad de acceso
La accesibilidad es crucial para una experiencia óptima, especialmente para estancias cortas.
Las conexiones fluidas (carreteras, trenes o lanzaderas despejadas) hacen que el destino sea accesible para todos. Al igual que la proximidad de las principales autopistas y de carreteras anchas y bien pavimentadas.
Nivel del sendero
El nivel de las pistas debe corresponder a las expectativas de los esquiadores. Una estación mal adaptada puede frustrar tanto a principiantes como a expertos. Los senderos bien distribuidos permiten que cada uno avance a su propio ritmo.
Los 5 niveles de pendiente
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muy facil
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fácil
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medio/variado
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en general difícil
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muy dificil
Variedad de senderos
La variedad mantiene el interés durante varios días: senderos largos, técnicos o forestales evitan la monotonía.
Una estación diversa satisface todos los estilos de esquiadores, ya sea que busquen descensos tranquilos, desafíos deportivos o fuera de pista.
Este es un criterio clave para rentabilizar una estancia, aunque sea de unos días de esquí.
Experiencia en la naturaleza
La inmersión en un entorno natural preservado refuerza la sensación de escape.
Los majestuosos paisajes y la atmósfera tranquila de un resort respetuoso con el medio ambiente brindan una satisfacción única. Para los amantes de la autenticidad y la desconexión, este criterio marca la diferencia.
Presupuesto
Los complejos turísticos asequibles le permiten equilibrar el placer y el gasto sin sacrificar la calidad de los servicios.
Generalmente los dominios grandes son más caros que los dominios medianos. Cuantos más kilómetros de pistas busques para disfrutar de jornadas variadas de esquí que nunca son iguales, ¡más tendrás que meter la mano en la cartera! Para esquiadores avanzados o expertos este es un criterio a tener en cuenta, para principiantes una pequeña estación es más que suficiente.
Solo
Viajar solo requiere una experiencia adecuada, oportunidades de encuentro, servicios personalizados y un ambiente agradable.
Las estaciones adaptadas permiten a los esquiadores solitarios integrarse fácilmente y aprovecharlas al máximo sin sentirse aislados.
Después de esquiar
Bares, spas o conciertos ofrecen momentos de relajación imprescindibles para equilibrar esfuerzo y placer.
Una estación sin vida después de esquiar puede volverse rápidamente monótona, incluso para los aficionados. Aunque una buena fondue con amigos en el alojamiento no está tan mal.
Para deportistas
Los esquiadores deportivos buscan desafíos e infraestructuras de alto rendimiento, como descensos técnicos, parques de nieve y áreas seguras fuera de pista.
Una gran diferencia de altitud y numerosas pistas negras también son ventajas importantes para un esquiador experimentado.
Con la familia
Las familias buscan sobre todo seguridad y tranquilidad. Las infraestructuras adaptadas (guardería, pistas para principiantes, actividades para niños) garantizan una estancia sin estrés, para que los adultos puedan practicar esquí, mientras los más pequeños también se divierten a su manera.
Un resort familiar permite a todos, grandes y pequeños, disfrutar plenamente de sus vacaciones.
