Es difícil sospechar que Michel Peronnet, consultor energético, ingeniero jubilado cuyo historial profesional consta de 39 años en el Puerto Autónomo de Marsella y 25 años en Lavéra (fue el primer director de Fluxel), se oponga al desarrollo económico del territorio. Él mismo lo dice: “Soy alguien que defiende la industria”.
Precisamente, en nombre de la salvaguardia del sector, optó por acercarse – sin ser miembro – al colectivo Stop THT 13-30, que lucha contra el proyecto de línea aérea de muy alta tensión (400.000 voltios) apoyado por Réseau Electricity de Francia. (RTE) entre Jonquières-Saint-Vincent, en Gard, y Fos-sur-Mer. El objetivo es responder a la anunciada duplicación del consumo de electricidad en la región de aquí a 2030, en el contexto, en particular, de la descarbonización de la zona industrial-portuaria de Fos. Para el ingeniero, “A nivel industrial, esta línea es una tontería”.
Un aumento de las necesidades de electricidad.
Al igual que los miembros del colectivo, Michel Peronnet cuestiona en primer lugar la urgencia del calendario propuesto por RTE y las estimaciones de las necesidades reales de electricidad en la región de aquí a 2030. “Habrá que explicarnos cómo duplicar el consumo de la región de Paca hasta 2030. Necesitaríamos 6 gigabytes adicionales, es decir, más de dos centrales nucleares. Es imposible. Pero para 2040, 2045, podemos ‘escuchar'”.
¿Qué pasa con las necesidades de Zip, que dice que espera el establecimiento de nuevas fábricas particularmente ávidas de electrones en un futuro próximo? Para Michel Peronnet, “Muchos de estos proyectos no están asegurados antes de 2035”.
Jean-Laurent Lucchesi, biólogo y miembro del colectivo, recuerda por su parte que en abril de 2024, el propio director general de Total, Patrick Pouyanné, se declaró muy reservado sobre el rápido auge del hidrógeno verde, en el centro de las perspectivas actuales para el desarrollo del Fos Zip. Otro ejemplo: “ArcelorMittal aún no se ha decidido sobre su horno eléctrico”señala Michel Peronnet. El 27 de septiembre de 2024, el propio prefecto solicitó, entre las condiciones para continuar con el proyecto, una reevaluación de las necesidades eléctricas de Zip en los próximos años.