Primeras señales de alerta – La Libre

Primeras señales de alerta – La Libre
Descriptive text here
-

¿Hemos sido, sin embargo, mejores que los demás? ¿Y nuestros gobiernos han estado más inspirados? No, dos veces no. Porque la buena resistencia de nuestro país a los shocks de los últimos años es, en realidad, una farsa: se encuentra, de hecho, en la indexación automática de los salarios que permitió evitar la erosión del poder adquisitivo de los belgas, donde El golpe fue mucho más duro para los ciudadanos de otros países de la Unión Europea. Es una realidad bien conocida: a Bélgica le va mejor que a otras economías de Europa cuando la inflación se acelera pero, por el contrario, lucha por beneficiarse de un retorno al crecimiento.

¿Inflación superior al 3% en 2024? Los últimos datos sugieren esta posibilidad

Mientras las encuestas hacen temblar el espectro de una nueva y larga crisis política al día siguiente de las elecciones – la proximidad de las elecciones municipales en octubre debería paralizar un poco más las cosas – surge una certeza: nuestro país se verá rápidamente superado por la agenda económica. Porque los primeros indicadores ya anuncian un futuro difícil: las exportaciones de nuestras empresas se están quedando atrás, en un contexto de deterioro de nuestra competitividad, la desindustrialización de nuestro tejido económico -incluido Flandes- se acelera y la dinámica empresarial se estanca.

La legislatura que finaliza en este contexto de crisis habrá enmascarado finalmente los grandes males de la economía belga: ineficiencia del gasto público, impuestos aplastantes, costes laborales exorbitantes… Los próximos ejecutivos tendrán la obligación de superar sus diferencias ideológicas para atreverse finalmente reformar fundamentalmente nuestro modelo socioeconómico que se ha vuelto arcaico. De lo contrario, el declive será inevitable…

-

PREV Séptimo día de ocupación en la Universidad de Ginebra
NEXT Tres enfoques antisociales | Tribuna de Ginebra