En Suiza se ha subestimado en gran medida el impacto del transporte sobre el medio ambiente y la salud. Esto es lo que muestran los documentos federales oficiales filtrados. Bajo los auspicios de DETEC y Albert Rösti, la Oficina Federal de Desarrollo Territorial (ARE) se ha demorado en no publicar estas cifras antes de la votación del 24 de noviembre sobre la ampliación de las autopistas.
Probablemente la Confederación no quiso publicar estas nuevas cifras antes de la votación del 24 de noviembre sobre la ampliación de la red de autopistas. La Oficina Federal de Desarrollo Territorial lo escribe en blanco y negro: “La publicación antes del 24 de noviembre no sería apropiada”.
El “coste externo del transporte” – “externo” porque no lo pagan los usuarios – sería de hecho un 70% superior a las estimaciones anteriores, con 11 mil millones de francos en costos adicionales.
La RTS pudo consultar los documentos en cuestión. La razón dada para justificar su no divulgación: estas cifras son muy esperadas y complejas, por lo que se debe garantizar una comunicación cuidadosa.
Giro de vuelta
La administración quería esperar hasta diciembre y la publicación del informe de la Oficina de Estadística sobre los costes y la financiación del transporte. Una comunicación conjunta habría situado la estimación actualizada de los costes del transporte exterior en un contexto más amplio.
Interrogada por la RTS sobre varios puntos de estos documentos, la Oficina Federal de Desarrollo Territorial sólo dio una respuesta: “La publicación ‘Costes externos del transporte’ aparecerá en octubre”.
No se dieron detalles ni explicaciones, a pesar de un cambio evidente. La administración publicará así en octubre cifras que no quería publicar hasta después del 24 de noviembre. Este giro podría explicarse por la presión política y mediática.
¿Cálculo político?
De hecho, hace dos semanas, en el Consejo Nacional, un funcionario electo de los Verdes mostró su impaciencia. Recuerda a Albert Rösti que las cifras sobre los costes del transporte exterior se publican normalmente entre junio y agosto. Desde entonces, varios medios de comunicación han investigado estos retrasos. El medio online watson.ch ya había acusado a Albert Rösti de retener un informe sobre la biodiversidad antes de la votación del 22 de septiembre.
A raíz de los artículos del NZZ am Sonntag y de Le Temps, los referendos opuestos a la ampliación de las autopistas lanzaron una petición en la que piden recalcular, a la luz de nuevos datos, los costes y beneficios de los proyectos de autopistas previstos.
Al final, los servicios de Albert Rösti podrían haber considerado que era mejor publicar estos datos antes de la votación, en lugar de ser acusados por la oposición de ocultar información.
Nueva batalla de números a la vista
Sin embargo, si los costes externos generados por el coche aumentaran un 60% con el nuevo método de cálculo, lo mismo ocurriría con el tren. Por tanto, las razones de estas nuevas estimaciones aún no están claras. Necesitaríamos el informe completo para juzgar el efecto de estas cifras actualizadas en la votación.
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De este modo, en octubre los opositores podrán examinar el informe desde todos los ángulos. Pero no serán los únicos. En el NZZ am Sonntag, un profesor de economía critica también la forma de calcular los costes externos del transporte. Cree que estos cálculos perjudicarían injustamente… al coche.
Después de las votaciones sobre el AVS y el segundo pilar, la votación sobre las autopistas también podría dar lugar a otra batalla de números.
Romain Carrupt, Céline Fontannaz
Web de adaptación: Julien Furrer
