DEn el contexto de la reanudación de los controles en las fronteras alemanas con Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos, no se han registrado incidentes importantes, informan las fuerzas de policía de Renania-Palatinado y Sarre. “Sin embargo, hemos realizado varias detenciones que justifican estos controles”, indicó un portavoz de la policía de Tréveris.
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Los agentes observaron casos de migración ilegal, incautaron drogas y armas, ejecutaron varias órdenes de arresto y deportaron a personas.
Los controles provocaron sobre todo atascos, sobre todo en la autopista procedente de Luxemburgo. No obstante, la medida se flexibilizó cuando los atascos alcanzaron una duración de entre 20 y 25 minutos, para no molestar a los trabajadores transfronterizos, subrayó la policía.
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Además de los controles fijos, también se desplegaron patrullas móviles.
La medida, ordenada por el ministro del Interior y destinada a frenar la inmigración ilegal, debía durar seis meses. Este tipo de controles ya se llevan a cabo en las fronteras con Polonia, la República Checa y Suiza desde octubre de 2023, y en la frontera con Austria desde septiembre de 2015.
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